En una sesión de la Comisión de Transparencia, Participación Ciudadana y Control Social en la Asamblea Nacional, se expusieron detalles sobre la desaparición de un significativo patrimonio cultural. Aproximadamente 8 mil piezas, que incluyen joyas, cuadros y otros objetos de gran valía, han sido reportadas como desaparecidas del Museo de Carondelet.
Los comparecientes a la mesa legislativa arrojaron luz sobre la desaparición. María Alexandra Guarderas, ex auxiliar de servicio del Palacio de Gobierno, declaró que durante la gestión del expresidente Lenin Moreno se identificaron varios funcionarios presuntamente involucrados en la sustracción de piezas del museo. Una de ellas estaría enfrentando tres juicios por el hecho; y, otro, se habría suicidado por no poder justificar su enriquecimiento repentino.
Guarderas señaló que la Fiscalía tiene conocimiento de esta situación y, además, detalló que, luego de 2 o 3 meses de la posesión de Moreno en la Presidencia, el director administrativo dio la orden de desmontar el museo, de forma secreta y de dirigir los objetos a la casa de reserva militar y al Museo del Pasillo.
Expertos en gestión cultural y procesos de archivo y museos, como Andrea Encalada y Luis Puente Hernández, coincidieron en la gravedad del delito cometido contra el Patrimonio Cultural del Ecuador. Se estima que alrededor de 2.5 millones de dólares en arte, cultura y memoria histórica nacional han sido arrebatados.
“Carondelet debe tener la trascendencia histórica, y rescatar la memoria del país. Un país sin memoria, es un país sin historia”, dijo Encalada.
Sobre la posibilidad de rescatar el Museo de Carondelet, Encalada recalcó que “va a ser muy difícil, puesto que, según el inventario que recibió el expresidente, Guillermo Lasso, del gobierno de Lenin Moreno, existían apenas 3 mil piezas del Museo de Carondelet, cuando su totalidad era de 11 mil”.
“Es muy grave cómo se ha afectado la memoria histórica del Ecuador, porque no solamente se perdieron objetos valiosísimos, sino que, se cerraron las puertas de ingreso a la ciudadanía nacional y extranjera, fomentando la distancia entre el gobierno y sus mandantes”, insistió.
Por su parte, Juan Paz y Miño, historiador, destacó la relevancia del Museo de Carondelet como un archivo histórico de la Función Ejecutiva del Estado, y resaltó la importancia de diferenciarlo de un museo convencional.
Tras las revelaciones, se decidió presentar una denuncia ante la Fiscalía por el presunto delito de pérdida o sustracción de elementos patrimoniales. Sin embargo, se confirmó que ya existe una denuncia previa interpuesta por la legisladora Pamela Aguirre en febrero de 2022 por peculado.
El presidente de la comisión, Patricio Chávez, clausuró la sesión subrayando la importancia del trabajo técnico para transparentar el funcionamiento del aparato social.