La niña nació en 2020 con una fisura palatina, en una bañera dentro de la casa de la madre. Aunque al principio la mujer la alimentó, con el tiempo decidió esconderla en un cajón bajo su cama.
Los primeros días de noviembre, el palacio ya había comunicado sobre el quebranto en la salud de la reina Camila. Ahora, mencionan que los sintomas postvirales persisten.