Disfrazado del "Joker", Kyota Hattori llevó consigo un cuchillo y un mechero para atacar a varios ciudadanos que se movizaban en tren a lo largo de Tokyo. A finales de julio fue condenado a 23 años de prisión por el hecho, que no dejó fallecidos.
“Personificar el Joker fue un pretexto para evidenciar el malestar de nuestra sociedad. Desgraciadamente todos tenemos algo del Joker”, Horacio Rafart.