El Chavo del 8 de Roberto Gómez Bolaños, también conocido como Chespirito, es un programa mexicano con niveles de impacto en Latinoamérica que pocas producciones han podido igualar.
El show estrenado del 20 de junio de 1971, apto para todo público, tuvo una extensión de 1300 capítulos que han continuado transmitiéndose en toda la región por más de 50 años.
El "programa número uno de la televisión humorística" le valió millones en ganancias a todos quienes estuvieron involucrados en su creación y ejecución.
Los actores que le dieron vida a los icónicos personajes de la vecindad ganaron en total desde 10 hasta 50 millones de dólares, según las estimaciones del sitio web Celebrity Net Worth que se encarga de calcular las fortunas de las celebridades de acuerdo a la información disponible en línea.
Florinda Meza, viuda de Chespirito, participó en dos de sus programas con varios personajes. Doña Florinda, Popis, La Chimoltrufia, interpretó estos y más personajes por 15 años.
Actualmente se encuentra en una lucha por los derechos de autor que le correspondían a su esposo, para crear una bioserie, en la que ganaría más de los 20 millones de dólares que obtuvo mientras actuaba junto a Roberto.
Del mismo modo, Carlos Villagrán, quien dio vida a Quico, ganó alrededor de 10 millones de dólares en los años en que participó de los distintos programas de Chespirito.
De acuerdo a Celebrity Net Worth, Chespirito fue el que más dinero cosechó de todos sus compañeros. Por ser el creador, protagonista y productor de todos sus shows, Roberto ganó 50 millones de dólares.
Por otro lado, Rubén Aguirre, quien caracterizó al personaje del Profesor Jirafales, reveló en entrevistas años atrás, que cuando trabajaba en el programa ganaba 650 pesos (32,20 dólares) y en los últimos años de su carrera el valor solo subió a 700 (34, 68 dólares).
La Chilindrina, el personaje llevado a la vida por María Antonieta de las Nieves, significó para ella un total de 10 millones de dólares. A pesar de eso, en una entrevista para Telemundo, la actriz criticó la paga que recibían.
“Trabajar para niños es lo menos bien pagado, por no decir el más mal pagado. O sea que si yo gané 1,000 pesos o 1,500 por programa, a mí me daban 150 pesos por cada vez que pasaba”, aseguró.
En su libro "Había una vez una niña en una vecindad: Esta es mi historia", detalló que en otros shows le ofrecían una sueldo más elevado y que fue un "error" trabajar en el Chavo del 8.
“Honestamente, me costó mucho trabajo decidirme a dejar a ‘Chespirito’. Con él ganaba 100 pesos mexicanos (5 dólares) a la semana y en el otro lugar iba a tener 2 mil por programa, o sea, mil por semana. La vida es un sendero de encrucijadas y muchas veces toma uno el sendero equivocado. ¡Todos cometemos errores!”, expresó.
Ganarse el amor y reconocimiento del público de todo un continente debe ser gratificante para los actores, sin embargo, eso no evitó que haya una diferencia salarial notoria y otros problemas entre ellos.
Algunos siguieron adelante con sus carreras y otros, como Carlos Villagrán, crearon programas en donde ellos fueran los protagonistas, pero no tuvieron el mismo éxito.