El pasado fin de semana se conoció que Glas se refugió en calidad de huésped en la embajada de México en Quito tras ser requerido por la Fiscalía. El político expresó temor por su seguridad y libertad personal.
Hasta ese momento no se sabía con exactitud el caso por el que el exfuncionario era investigado. Sin embargo, la fiscal precisó que la orden de localización ocurre por el caso Reconstrucción de Manabí, que surge tras el terremoto del 2016.
Salazar recordó que ya se pidió al juez de la Corte Nacional de Justicia, Luis Rivera, que señale fecha y hora para la formulación de cargos contra el exvicepresidente y dos personas más, pero han ocurrido intentos de dilatación del proceso.
Esto en relación con que el magistrado solicitó a la Asamblea que autorice o no el enjuiciamiento del exvicepresidente Jorge Glas, por presunto peculado.
“La Fiscalía no puede parar su acción, por eso hemos solicitado que el ciudadano comparezca para algunas diligencias”, aseguró Salazar en entrevista con Teleamazonas.
Agregó que “la situación del señor Jorge Glas debe ser resuelta en los tribunales, no en las embajadas”.
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También detalló que el oficio para localizar al número dos del correísmo fue emitido el 16 de diciembre para que la policía lo traslade a la Fiscalía. “No existe orden de detención o captura, simplemente el ciudadano tiene que concurrir a la Fiscalía para que comparezca y rinda su versión".
Salazar sostiene que no se puede hablar de que Glas está siendo perseguido, “simplemente estamos realizando actos de investigación”, dijo a la cadena Teleamazonas.
Sobre la filtración de información que se ha evidenciado en este caso y en el operativo Metástasis, la fiscal mencionó que aún hay redes que operan en el sistema de justicia y policía.
En el caso Reconstrucción de Manabí, el Ministerio Público investiga un presunto delito de peculado, pues habría existido abuso de dinero público en beneficio de terceras personas naturales y jurídicas, que fueron contratistas y fiscalizadores de contratos suscritos en el marco de la emergencia por el terremoto del 16 de abril de 2016.
Glas fue condenado en diciembre de 2017 a seis años de cárcel por la trama de corrupción de la firma brasileña Odebrecht. También fue condenado por el caso Sobornos 2012-2016, pero en 2022 obtuvo su libertad condicional.