La Organización Mundial de la Salud (OMS) indicó en un reciente informe que se evidenció un incremento de la transmisibilidad de la variante Delta del Covid-19. Así, más de 60 países del mundo ya han registrado casos con esta mutación del SARS-CoV-2 original.
El organismo internacional catalogó a la variante Delta, encontrada por primera vez en India el año pasado, como "de preocupación" y según la base GISAID de rastreo de mutaciones del Covid-19, la Delta tiene más presencia en Reino Unido (21.552 casos), India (5.749 casos), Estados Unidos (2.097 casos), Alemania (633 casos), Canadá (360 casos) y Singapur (295 casos).
Los expertos indios creen que la cepa Delta es 50% más contagiosa que la Alfa, encontrada inicialmente en Reino Unido. Además, esta sería la “causa principal” de la segunda ola en India, que ha resultado brutal para el sistema sanitario del país, logrando incluso colapsarlo.
La mutación Delta también es responsable del 95 % de los casos de Covid-19 en Singapur, se ha vuelto dominante en el Reino Unido y se teme que pronto lo sea en Estados Unidos. Los expertos alemanes están trabajando contrarreloj ante la inminente expansión de esta en el territorio nacional.
UNA VARIANTE DOBLEMENTE PELIGROSA
Los pacientes indios que se han contagiado con la mutación Delta presentan síntomas poco vistos con las otras cepas y, sobre todo, registran muy pocos problemas respiratorios. En cambio, las personas sufren discapacidad auditiva, dolor de estómago, náuseas y vómitos, pérdida de apetito, dolor en las articulaciones, coágulos sanguíneos que podrían provocar gangrena, y trastornos gástricos.
El cardiólogo Ganesh Manudhane dijo a Bloomberg que en los últimos meses ha tratado a pacientes que desarrollaron complicaciones trombóticas (sospechan que se debe a esta cepa) y a algunos tuvo que amputarles los dedos o un pie entero por microtrombos que llevaron a la muerte del tejido afectado. Los coágulos se evidenciaron en todos los grupos de edad, pero hasta ahora no se entiende por qué unos pacientes los desarrollan y otros no.
Los datos de Inglaterra y Escocia le dan a pensar a los científicos que la cepa Delta conlleva un mayor riesgo de hospitalización que la variante Alfa.
LA VACUNACIÓN, UNA LUZ AL FINAL DEL TÚNEL
El científico alemán Karl Lauterbach dijo que, hablando de los efectos y la expansión de la cepa Delta, “lo clave es una tasa de vacunación muy alta, lo que reduce la mortalidad”. No obstante, todavía no hay seguridad que las vacunas existentes protejan contra esta variante.
Por el momento, los datos que brindan las instituciones de salud británicas indican que las vacunas son menos eficaces sobre la variante Delta n comparación con la Alfa. Tampoco se saben si ayudan a reducir el riesgo del agravamiento de la infección y la hospitalización.
De acuerdo al medio RT, el médico indio Abdul Ghafur, advirtió que es hora de desarrollar nuevas vacunas que tengan en cuenta las nuevas variantes del coronavirus.
"No podemos adelantarnos al virus, pero al menos podemos seguirle el ritmo. Si bien el año pasado la comunidad científica pensó que había aprendido lo principal sobre su nuevo enemigo, ahora esto ha cambiado y ya no es así”, concluyó el experto.