El ciclista, Alfredo Campo, terminó quinto en la final de los Juegos Olímpicos de Tokio y con ello aseguró un diploma para Ecuador; con su hazaña, el ciclista logró hacer historia en el BMX ecuatoriano.
Campo cerró su participación de manera brillante, al quedar a dos puestos del podio que ocupan los mejores del mundo. El neerlandés Niek Kimmann fue quien se logró colocar la anhelada medalla de oro en BMX, mientras que el británico Kye Whyte se llevó la de plata. El tercer puesto fue ocupado por el colombiano Carlos Ramírez quien ganó la medalla de bronce.
El ciclista ecuatoriano tuvo una diferencia de 1,6 segundos en comparación al ganador.
La brillante participación del deportista cuencano hizo que el Comité Olímpico Internacional que otorgara un diploma, para reconocerlo como uno de los ocho mejores del mundo en el BMX.