La suerte de Pablo Muentes se acabó la madrugada del lunes 4 de marzo, cuando la Fiscalía allanó su casa y lo retuvo. Lo acusan del supuesto delito de delincuencia organizada en el caso Purga.
En su comparecencia, entre lágrimas, Mayra Salazar pidió disculpas a los ecuatorianos por su rol en los casos Metástasis y Purga. Además, le dedicó un mensaje a la Fiscal General del Estado.