La ola de violencia en el país suma nuevas víctimas. Esta vez un caso, bajo la modalidad de sicariato, se registró en Quevedo, provincia de Los Ríos, durante la madrugada del domingo 23 de enero de 2022.
Sujetos no identificados ingresaron a un domicilio, ubicado en la calle Rumiñahui y Juan Montalvo, barrio Galo Plaza, cuando en el lugar se festejaba la confirmación de Triniti Mecías Arias, una adolescente de 13 años. Los hombres dispararon contra todos los presentes.
Como resultado del ataque, la Triniti y su tío, identificado como Gabriel Vásquez Moreira, de 53 años, murieron; mientras que otras dos personas fueron trasladadas hasta el hospital del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) de Quevedo.
La investigación reportó que uno de los heridos, Abel Aurelio CV, mantiene una boleta de captura activa y además registra antecedentes penales por los delitos de asesinato y tenencia de armas no autorizadas.
De acuerdo con la versión de testigos, los hombres armados llegaron a la vivienda, a bordo de dos camionetas y con fusiles.
Acciones para frenar la inseguridad
Hace una semana, la ministra de Gobierno, Alexandra Vela, informó que en la provincia fluminense se han fortalecido los ejes de investigación e inteligencia de la Policía Nacional.
“La inseguridad tiene un origen fundamental y es el narcotráfico, en todas sus formas y sus caras, en todos los delitos conexos que conlleva ese fenómeno que ataca a la sociedad y al mundo en su conjunto, pero cada una de esas caras del delito tiene una forma específica en las distintas provincias y ciudades, no todas las formas se expresan de la misma manera, en el caso de la provincia de Los Ríos se expresa mediante la extorsión, que ataca a todas las actividades de carácter económico y coloca a las personas en un escenario de inseguridad”, dijo la Ministra.
Ante esto, enfatizó que el Gobierno no permitirá que se enraíce en la provincia, por lo que se reforzará el modelo de gestión para desarticular a las bandas y la delincuencia organizada en Los Ríos.
De su lado, el presidente de la República, Guillermo Lasso, manifestó ayer que debido al combate contra el tráfico de drogas, se ha reducido el territorio de las mafias, y esto ha provocado consecuencias como el aumento de las muertes violentas en las calles.
Del mismo modo, Lasso se refirió a la necesidad de hacer cambios profundos a las leyes que amparan el trabajo de la fuerza pública, por eso, dijo: “el próximo martes presentaré a la Asamblea Nacional la Ley que Regula el Uso de la Fuerza y, además, reformatorias a varios cuerpos legales para el fortalecimiento de la seguridad ciudadana y lucha contra el crimen transnacional”, aseguró.
Dentro de los objetivos de este proyecto de ley, explicó, está el autorizar el uso progresivo de la fuerza respaldando a los policías y militares.