La Presidenta del Consejo de la Judicatura (CJ), María del Carmen Maldonado, emitió una medida preventiva de suspensión contra los agentes fiscales Erika V. y Rolando A., quienes participaron en el caso de presunta violación y tortura contra dos menores de edad de 6 y 8 años en Naranjal.
La suspensión de los servidores, que es una facultad expresa de la máxima autoridad del CJ, fue resuelta tras la declaración previa de manifiesta negligencia por parte de la Corte Provincial de Justicia de Guayas.
Aquello se dio luego de una denuncia presentada por la Asociación de Mujeres Abogadas del Guayas (AMAG), por lo que el CJ procedió a pedir la declaratoria jurisdiccional previa en el caso, misma que fue aprobada con el voto de mayoría de los jueces Carlos González Abad y Miguel Costain Vásquez, de la Corte Provincial de Justicia de Guayas.
Maldonado puntualizó que la Judicatura rechaza todo tipo de violencia, más aún cuando esta es ejercida contra niñas, niños y mujeres.
Además, indicó que en este caso, "el CJ ha actuado con la celeridad que se necesita para proteger los derechos y el interés superior de los niños que fueron víctimas de agresiones y que el Estado está obligado a observar".
¿Dónde está la pareja involucrada en la tortura y violación del niño en Naranjal?
Según las investigaciones, el niño llegó por primera vez a la casa de salud de Naranjal el 4 de septiembre y regresó el 5 porque empezó a convulsionar. Recién ese día se notificó a la Policía, pues la madrastra había dicho que les había caído sopa hirviendo encima a sus hijastros y que les estaba dando pastillas para la infección.
Daniel Kuri, director provincial del Consejo de la Judicatura en el Ámbito Disciplinario, reveló que cuando el fiscal Kennet A. realizó la audiencia en la que se limitó a acusar de violencia física a la madrastra de los niños, ya se conocía sobre un informe médico que había sido practicado al niño de 6 años, en el que, entre varias agresiones físicas, se reportó sobre un palo introducido en el recto del menor.
Al momento, el niño sigue hospitalizado debido a que usa una bolsa de colostomía para defecar, mientras que su hermana está en una casa de acogida. Ambos están bajo la tutela del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES).