En un operativo de armas, municiones y explosivos, la Policía Nacional detuvo a uno de sus agentes. En conjunto con la Fuerzas Armadas, al requisar un vehículo de alta gama, las sospechas se levantaron al percatarse que tenía vidrios polarizados y no se mostraban las placas.
Luego, al revisar los datos de la matrícula notaron que no coincidían con la información del vehículo, sobre todo la serie del automotor. La persona que manejaba era un elemento de la Policía Nacional. Como parte de los elementos de convicción se obtuvo el chaleco antibalas del uniforme y su arma de dotación.
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En un video que circula en las redes sociales se ve cómo el agente se despoja de su uniforme y lo entrega al personal policial que procedió con la captura. Además, dejó dinero en efectivo en mano de las autoridades.