Jorge Glas abandona la cárcel de Cotopaxi en medio de ovaciones
El exvicepresidente de la República, Jorge Glas, abandonó este domingo la cárcel de Latacunga, en la provincia de Cotopaxi, luego de que el sábado el juez de Manglaralto, en Santa Elena, Javier Moscoso, le concedió un habeas corpus.
Aplausos y gritos formaron parte del ritual que realizaron personas afines a Glas para celebrar su liberación, tras haber pasado 1.645 días en reclusión por su vinculación a casos de corrupción.
Durante su anhelada salida, Glas vistió formal con un terno color azul marino y camisa blanca. Llamó la atención un arete redondo y negro insertado en su oreja izquierda.
En el trayecto hacia la libertad decidió caminar entre la multitud para tomarse fotografías, y luego se subió a un carro color plateado que lo esperaba en la avenida cercana al centro penitenciario. Desde el vehículo desplegó una pancarta con la cara del expresidente, Rafael Correa.
De acuerdo con medios locales, alrededor de 200 personas se agolparon en los exteriores de centro de detención para celebrar la salida de Glas.
Algunos de los asambleístas de la bancada correísta UNES como Virgilio Hernández y Pabel Muñoz estuvieron en los exteriores de la cárcel desde temprano para recibirlo y dijeron que "por fin hay justicia".
Mientras desde otros sectores se ha cuestionado la medida como un error del gobierno de Guillermo Lasso, pues se especula que habría un acuerdo de gobernabilidad con el correísmo a cambio de la liberación de Glas.
Glas cumplía dos sentencias de seis y ocho años de cárcel respectivamente: una por el delito de asociación ilícita en la trama de corrupción de Odebrecht, y otra por cohecho en el caso Sobornos.
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