Joseph “Chogrin” Game: la máquina creativa
Chogrin nació de un apodo que la familia le puso en su niñez, cuando se movía entre su natal Ecuador y Estados Unidos. "Me decían cholo gringo y lo acorté a Chogrin".
Joseph tiene 39 años pero tiene cara de niño. Con su barba y su gorra estampada con el fantasma de “Ghostbusters” parece un personaje más de su cuarto en Los Ángeles. A su alrededor juguetes de las tortugas Ninjas pelean con Popeye y los héroes de “Star Wars”. En las paredes, afiches de películas de HellBoy y Frankenstein custodian un bajo y unas repisas donde cómics, mangas y cuadernos de dibujos nos recuerdan que acá el cuarto de juego es también la oficina de “Chogrin”, el apodo que familiares y amigos le dieron a Joseph “por ser cholo y gringo”.
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NIÑO SOÑADOR
Desde temprana edad Joseph dibujó las aventuras que vivía con sus amigos y su mami guardaba todo en una caja como si siempre había tenido la certeza que su hijo tenía tanto talento como futuro. “Me considero un contador de cuentos y lo hago a través de distintos medios artísticos como la ilustración, juguetes de personajes, animaciones y películas”, cuenta el artista que dejó Ecuador para estudiar Bellas Artes en Filadelfia y obtuvo un bachelor en Artes e Ilustración, con mención en Cine y Animación. “Salir de Guayaquil fue difícil, tuve que crecer muy rápido. Esa etapa de mi vida me sirvió de inspiración para mis cuentos, fue una fase para madurar y eso lo llevé a mi cortometraje”, añade el director de “Lucky Brave’s Sunshine”, una obra animada que se presentó en numerosos festivales como Berlín, Viena y Tokio y que relata la historia de un vaquero del espacio que busca un remedio para su abuela.
“Chogrin” se siente realizado y libre. El artista recuerda que su pasantía en Cartoon Network se convirtió en un trabajo que duró casi 10 años. Luego pasó a Disney y colaboró como freelance para Netflix y Nickelodeon. Allí trabajó como ilustrador y diseñador y descubrió que también tenía talento para diseñar juguetes. “Empecé realizando esculturas y poco a poco evolucionó a ediciones limitadas de juguetes”. Así nació el juguete inspirado en Guillermo del Toro que se lanzó al mercado con 400 ejemplares. “Siempre digo que Guillermo del Toro es mi tío y Jorge R. Gutiérrez, mi hermano. Son mis héroes creativos. Los dos trabajaron juntos y su imaginación no tiene límite. HellBoy –dirigido por del Toro- es mi superhéroe preferido. Conocí a Guillermo en el 2006 en una convención de Cómics y nunca dejamos de hablarnos”, relata el guayaquileño hiperactivo. “Siempre tengo varios platos cocinándose y nunca sé qué plato va a salir primero. En este momento estoy haciendo juguetes, escribiendo un libro para niños y en la preproducion de un corto”.
Joseph recuerda que su primer despertar artístico en el cine fue “El Mago de Oz” por el tratamiento de los colores y luego se mezclaron su apego a la cultura latina con “El chavo del 8” y “El Chapulín Colorado” sin olvidar series japoneses como Supercampeones, Caballeros de Zodiaco y Jiban. “Chogrin” representa la multidiversidad cultural en un país donde soñar puede convertirse en un estilo de vida. ¿Qué se viene a futuro? “Quiero seguir difundiendo mi arte e inspirar a más artistas ecuatorianos. Tengo el proyecto de hacer una película sobre la cultura de los años viejos”, concluye. Pareciera que “Chogrin” se viene a Ecuador...
