Desde encebollado con cerveza bien helada, hasta brócoli hervido para desintoxicar el cuerpo, pasando por una sopa caliente y frutas que contengan potasio, cada persona tiene su receta casera para tratar de aliviar los terribles síntomas de la resaca.
¿Son efectivos estos métodos? Se lo preguntamos a la doctora Bella Morales, médica gastroenteróloga, en el nuevo segmento de Revista Vistazo: “Consultorio Online”
¿CÓMO COMBATIR EL MALESTAR POR EXCESOS?
La doctora Bella Morales, médica gastroenteróloga, hace una breve descripción de los mecanismos de acción de los productos que se emplean para ayudar al estómago frente a los excesos, aclarando que estas indicaciones son para personas que gozan de buena salud general y que no tienen ningún tipo de complicaciones gástricas.
La especialista señala que si se han presentado síntomas como ardor en el estómago, o hay antecedentes de gastritis o úlceras, hígado graso, cálculos en la vesícula, reflujo, se debe seguir estrictamente las indicaciones del médico tratante en cuanto a las comidas y bebidas que pueden consumir y los medicamentos que pueden ingerir.
ANTIÁCIDOS EFERVESCENTES
Después de leer los beneficios que ofrece el consumo de bicarbonato de sodio al organismo, Eugenia Morales decidió tomar media cucharadita de este producto cada noche. Leyó que combatía la acidez general y que eso ayudaba al cuerpo en muchos aspectos.
Como es una persona muy preocupada por su salud, se monitorea frecuentemente sus niveles de presión arterial. Semanas después de que iniciara con el consumo de bicarbonato, notó que su presión se había elevado. Ella no se imaginó que el nuevo hábito de salud que había incorporado no podía ser adoptado por personas hipertensas, como era su caso. Su médico se lo informó.
Justamente el bicarbonato de sodio es el ingrediente principal de las sales antiácidas efervescentes que disuelven en agua antes de consumirlas y actúan disminuyendo la secreción ácida que produce la ingesta copiosa de alimentos.
Son los antiácidos favoritos de muchos porque son de acción rápida. Se pueden tomar después de cada comida en los díasenlosquesevaacomeryabeberen exceso pero no se recomienda su uso durante períodos de tiempo prolongados sin prescripción o supervisión médica.
Estos productos no deben ser consumidos por personas hipertensas ni con complicaciones renales.
ANTIÁCIDOS EN SUSPENSIÓN
Cada vez que Leonor Díaz tiene un disgusto toma su “lechecita para el estómago”. La alivia casi inmediatamente. En este caso, ella no come ni bebe de más pero cuando se enfrenta a situaciones que la desafían emocionalmente y se altera, la segregación de hormonas relacionadas con el estrés en el estómago, hace lo suyo.
Las lechecitas que menciona son suspensiones que actúan “tapizando” la mucosa gástrica. Generalmente contienen magaldrato (compuesto de aluminio y magnesio) que neutraliza y tapona el ácido clorhídrico del estómago, y dimeticona, que reduce la tensión superficial de los gases, evitando su acumulación en el abdomen. Se toman 30 minutos después de las comidas y son de acción rápida. Pueden ingerirse por algunos días pero no se recomienda su uso durante períodos de tiempo prolongados a menos que el médico así lo indique.
PROTECTORES GÁSTRICOS
Cuando Eduardo González sabe que vienen días de mucha farra y celebración va a la botica a comprar sus “prazoles”.
“Lo que muchos llaman los ‘prazoles’ por la terminación de sus nombres: omeprazol, pantoprazol, lansoprazol, esomeprazol y rabeprazol, se llaman en realidad inhibidores de la bomba de protones, inhiben una enzima de las células parietales de la mucosa gástrica”, explica la doctora Morales. Actúan disminuyendo la secreción ácida de los alimentos, al aumentar el ph gástrico.
Su efecto suele presentarse durante las primeras 72 horas después de ingerirlo, pero existen presentaciones combina- das con bicarbonato de sodio que aceleran su acción. Se deben tomar 30 minutos antes de las comidas, nunca después. Con la excepción del dexlansoprazol que se consume con las comidas.
Pueden consumirse durante algunos días pero no se recomienda su uso durante períodos de tiempo prolongados a menos que el médico así lo indique.
NO SON PARA TODOS
La especialista advierte que pese a que se puede optar por los productos mencionados para aliviar el malestar causado por los excesos al comer y al beber, existen casos de personas que no conocen que tienen alguna condición de salud que los puede llevar a una enfermedad grave en la próxima ingesta copiosa de alcohol o de comidas.
La consulta médica periódica y realizarse los chequeos de salud que recomiende el profesional son la manera de conocer si hay temas de salud que pueden estar latentes aunque todavía no manifiesten síntomas graves.
Por su parte, la revista de la Biblioteca Nacional de Salud de Estados Unidos presenta información clave sobre la forma en que el exceso de alcohol afecta al organismo. Entre otros puntos señala que es un factor de riesgo para el desarrollo de cáncer en boca, garganta, colon y recto.
En el caso de cáncer al seno, los riesgos de desarrollarlo aumentan inclusive si el consumo es solo de una copa al día.
La entidad menciona que aproximada- mente la mitad de enfermedades del hígado que se reportan en el mundo son causadas por el consumo excesivo de alcohol, que aumenta las posibilidades de desarrollarhígado graso, hepatitis alcohólica, fibrosis y cirrosis hepática. También incrementa los riesgos de pancreatitis, una inflamación potencialmente mortal de los vasos sanguíneos del páncreas, entre otras afectaciones generales que implican el cerebro, el corazón y los pulmones entre otros órganos y sistemas.