Crece la demanda de seguridad privada
La inseguridad que vive el país ha llevado a que empresas y hogares destinen entre el 8 y 13 por ciento de su presupuesto para protegerse de la delincuencia. La contratación de guardias y la instalación de cámaras ha crecido en los últimos años.
Ecuador cerró el 2023 con un total de 7.878 crímenes y una tasa de 46,5 asesinatos, homicidios, femicidios y sicariatos por cada cien mil habitantes, la más alta en la historia del país. El número de robos fue igual de impactante: 75.954, con mayor perjuicio en Guayas y Pichincha, según la Fiscalía General del Estado (FGE).
La ola delictiva ha llevado a empresas y hogares a sumar a su presupuesto un rubro especial para la seguridad. Cámaras de comercio y municipios estiman que éste oscila entre el 8 y 13 por ciento. Datos del SRI también muestran que el gasto en sistemas de seguridad, llámese cámaras, alarmas, cercos eléctricos y demás, pasó de 745 millones de dólares a 922 en el periodo 2016-2023. En lo que respecta al gasto en la contratación de compañías de seguridad, éste pasó de 48 millones de dólares a 83 durante el mismo lapso.
El Ministerio del Interior registra hasta la fecha a un total de 1.905 compañías de vigilancia y seguridad privada a nivel nacional, 1.200 de ellas están operativas.
Según el vicepresidente de la Asociación Nacional de Empresas de Seguridad Integral e Investigación (ANESI), Miguel Orellana, el costo actual de un puesto de seguridad física, que incluye tres guardias, está en un promedio de 3.000 dólares más IVA. Estos valores están estandarizados para el sector público, pero el gremio aspira que con la nueva Ley de Seguridad y Vigilancia Privada ya publicada en el Registro Oficial, se aplique también al sector privado, a fin de ayudar a formalizar la actividad y a evitar la precarización y explotación laboral a los guardias de seguridad.
El directivo señala que la situación actual del Ecuador ha hecho que la demanda de servicios de seguridad crezca en un 30 por ciento. “Los campos donde más se nota el incremento ha sido en la seguridad electrónica y seguridad personal... Los sectores que más requieren de seguridad son el empresarial–ejecutivo, industria, banca y residencial y las ciudades con más demanda han sido Guayaquil, Quito, Manta, Cuenca y Santo Domingo”, expresa.
John Garaycoa, gerente de Mac Security, comenta que en el caso de su empresa los servicios integrales de seguridad e investigación se incrementaron en un 35 por ciento, en especial en casos de extorsiones en los que han sido contratados para investigar, los resultados obtenidos en estas pesquisas, añade, han influido también en la demanda de sus servicios de guardias, sistema de cámaras de vigilancia y vehículos blindados con protectores para los traslados.
“Es imperativo considerar enfoques más avanzados y sistemas que se alineen con las actuales amenazas en materia de seguridad, tales como estructuras que garanticen la integridad del guardia, carros blindados para el traslado vip y custodia, unidades de apoyo tipo convoy para traslados, armamento semiautomático como pistolas 9mm y armas largas, chalecos con estructuras de Kevlar, así como unidades móviles nuevas”, detalla.
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Negocios afectados
En el 2023 los comercios a nivel nacional fueron el blanco de la delincuencia, la FGE reporta un total de 5.745 robos en unidades económicas. Los sitios de gran afluencia de público como centros comerciales y malls no son ajenos a estos peligros, por lo que dentro de éstos se ha reforzado la seguridad física y tecnológica.
Rodrigo Beltrán, director de Securitas Ecuador, dice que dentro de las tecnologías que se están aplicando para este segmento están el reconocimiento facial, análisis forense, mapas de calor, detección de merodeo, paquetes sospechosos, cruce de líneas, entre otras.
La implementación de estas innovaciones, agrega, ayudan a tomar decisiones más asertivas y a ser más predictivos y no reactivos, siempre y cuando se parta de un análisis de riesgos de acuerdo a las necesidades del cliente.
Esta compañía de origen colombiano ha desarrollado varios servicios en este campo, tales como: seguridad especializada (personal de seguridad con arma, sin arma, OMT, supervisores, recepcionistas), escoltas para personas, mercancías y servicios de intervención y acompañamiento en zonas específicas (Servicio Mobile); seguridad remota con el monitoreo de cámaras, sistemas de alarma y de GPS; seguridad electrónica e implementación de software y hardware; protección contra incendios; así como gestión corporativa del riesgo (consultorías, estudios de confiabilidad).
La preparación del personal de seguridad privada es clave para garantizar una protección efectiva. Entre los aspectos que se toman en consideración al momento de capacitarlos están: manejo preventivo y disuasivo, resolución de conflictos, reacción bajo presión, protocolos de respuesta en emergencias, prácticas de tiro, entrenamiento físico, entre otros.
Impacto del sector
La seguridad privada cumple un rol importante para la ciudadanía, en muchos casos su aviso oportuno a la Policía Nacional (PN) ha logrado evitar un delito o un acto de terrorismo. Su función principal es la de prevenir el delito, remarca la ANESI.
Actualmente, las compañías de seguridad están trabajando más de la mano con la Policía Comunitaria o Preventiva. “Nuestra participación ha sido en convertirnos en ojos, oídos y voz para la PN, de esta manera hemos podido contribuir con información oportuna y veraz para la autoridad. Todas nuestras acciones y operaciones están enfocadas en la prevención del delito, sin embargo si las circunstancias lo ameritan afortunadamente ahora la Ley permite y faculta al guardia de seguridad a intervenir en defensa propia o de terceros, siempre y cuando sea en flagrancia y en nuestro sector de responsabilidad”, alega Orellana.
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