Las ventas de las pequeñas y medianas empresas (pymes) se han reducido en un 2% respecto al año anterior; alrededor de 1,2 millones de empleos dependen de su actividad productiva.
El promedio de pérdidas diarias ascendió a 55 millones de dólares; la afectación en ventas privadas y en exportaciones superan los 775 millones; mientras que el sector petrolero registró un impacto de 225 millones.