Yolanda Ch. de 24 años se había separado de su esposo debido a repetidos episodios de violencia intrafamiliar. Vivía junto a su bebé en el sector Santa Bárbara, del sur de Quito. Fue vista con vida por última vez la noche del 24 de marzo de 2021, ese día ella y su expareja sostuvieron una pelea.
El vecino de Yolanda que hacía trabajos de albañilería escuchó casi a la media noche de aquel miércoles una fuerte discusión. La mañana del jueves, el hombre escuchó el llanto de la bebé de Yolanda y la televisión prendida. La puerta de la vivienda estaba entreabierta. Pero no imaginó que algo andaba mal, sino más bien que su vecina se encontraba adentro.
A la mañana siguiente, el viernes 26 de marzo, el vecino volvió a ver la puerta abierta en la misma posición y entonces dio aviso a la dueña de la casa.
María, hermana mayor de Yolanda, estuvo llamándola varias veces, pero nunca obtuvo respuesta. Poco después recibió la llamada de la dueña de casa en dónde vivía Yolanda.
“Vaya a ver, porque el albañil que está trabajando en la casa me dice que la puerta del cuarto está sin seguridades”, le advirtió la mujer a María. Además, le dijo que las luces y la televisión se habían mantenido prendidas por dos días.
Al llegar al lugar, María encontró a Yolanda boca abajo, sobre su propia sangre y con una correa alrededor del cuello; y a su sobrina, recién nacida, con síntomas de deshidratación.
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“Tres veces la salvé de que le asesine, pero esta vez no pude (…)”, dijo María en su declaración a las autoridades de Justicia.
Según relata María, Yolanda ya habría sufrido tres atentados contra su vida por parte de William Paúl C. S., de 27 años y expareja de la víctima.
Hace tres años intentó acuchillarla, en una ocasión la golpeó con un martillo y en otra la apuñaló con un destornillador.
Además, quemó una boleta de auxilio y también llegó a amenazar de muerte a María por defender a su hermana.
Yolanda grabó uno de esos episodios en que él le decía: “si te separas de mí, no vas a vivir feliz, yo te voy a matar. Y si no puedo, pago 50 dólares para que te maten”.
La Fiscalía señaló que dos días después del femicidio de Yolanda, William Paúl C. S. se acercó a un patrullero en el barrio la Argelia, en el sur de Quito, el 26 de marzo de 2021. Le dijo al policía que se enteró de que su conviviente estaba muerta en el mismo lugar donde, dos días antes, mantuvieron una discusión, que “estaba dispuesto a colaborar con la justicia”.
Afirmó, además, que en medio de la discusión, la empujó dos veces por lo que se lastimó en la frente.
El policía llamó a preguntar a sus compañeros si se había levantado algún cadáver en el sector Santa Bárbara. Le dijeron que sí.
En la audiencia de formulación de cargos, William Paúl C. S. prefirió guardar silencio, mientras Fiscalía relataba el hecho delictivo y describía los indicios que lo señalan como presunto responsable del femicidio de su esposa, María Yolanda Ch.
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Rolando Gualoto, fiscal de turno en flagrancia, expuso el informe de la autopsia médico-legal, acta del levantamiento del cadáver, las versiones de los policías que ejecutaron la orden de detención, la denuncia de la hermana de la víctima y la boleta de auxilio que había obtenido la mujer ante los repetitivos hechos de violencia intrafamiliar.
El abogado de oficio del procesado pidió medidas alternativas, bajo el criterio de “presunción de inocencia”.
Pero el juez –por pedido de Fiscalía– ordenó la prisión preventiva de William Paúl, de 27 años, para asegurar su presencia en el proceso penal, puesto que el delito de femicidio –según el artículo 141 del Código Orgánico Integral Penal– sanciona con privación de libertad de veintidós a veintiséis años a la persona que es hallada culpable.
La instrucción fiscal de este caso durará 90 días. El juez ordenó medidas de protección para la hermana de la víctima y para toda la familia.
En Ecuador cada 72 horas muere una mujer víctima de su condición de género, según la Asociación Latinoamericana para el Desarrollo Alternativo (Aldea).