El hecho ocurrió la noche del sábado 24 de febrero de 2024. Dos hombres, que utilizaban uniformes militares, irrumpieron en las instalaciones tras agredir y dejar inconsciente a un soldado.
Los delincuentes intentaron robar un fusil, pero inmediatamente se activaron los protocolos de seguridad y se evitó el hurto del armamento.
Los detenidos habrían actuado en asociación ilícita con un cabo primero de la misma brigada. Ellos fueron entregados a la Policía Judicial para que se inicien las investigaciones y se proceda a los trámites administrativos y legales respectivos.
El Ejército también revisó el armamento en las bodegas de material bélico de las unidades militares de la brigada.
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“Estas acciones, que van en contra del honor y de la seguridad nacional, serán censuradas en estricto cumplimiento a las normativas administrativas disciplinarias, como las judiciales correspondientes”, dice un comunicado de la institución.
Un hecho similar se registró el pasado 13 de enero del 2024, cuando un sujeto intentó infiltrarse en las instalaciones militares de Quevedo.
El sujeto, que pertenecía a la banda terrorista ‘Los Choneros’, pretendía robar armas y atentar contra los soldados. La rápida acción de los militares evitó que el sospechoso hurte el material bélico.