Los presos de la Penitenciaría del Litoral, en Guayaquil, en la que en septiembre se produjo una de las peores masacres carcelarias de Latinoamérica con 119 muertos, volvieron a enfrentarse.
"Nos quieren matar a todos", "por favor ayúdennos", "en nuestro pabellón hay gente de otro pabellón", "nos quieren tumbar la puerta", fueron algunas de las suplicas de las personas privadas de la libertad, mientas transmitían en directo lo que sucedía al interior del centro carcelario.
La comunicadora Karol Noroña publicó en su cuenta de Twitter: "varios periodistas fuimos contactados por personas privadas de la libertad que desde el pabellón 2 de la #PenitenciaríaDelLitoral suplicaban ayuda. La balacera comenzó a las 19:00".
Y añadió que más de 14.500 fueron testigos de una transmisión en vivo "desesperante y dolorosa", que duró aproximadamente unas dos horas.
"Fueron dos horas y NADIE intervino. Lo último que contó una persona presa, antes de que la transmisión se pause, es que finalmente lograron entrar para asesinarlos. Terminó a las 02:27 y las detonaciones seguían, mientras las familias permanecen en exteriores, esperando lo peor", detalló Noroña en su tuit.
"Quiero que me haga un favor. Quiero que mande la ley, que mande los militares, la policía, porque hoy nos matan", fue uno de los mensajes que recibió la periodista de parte de un preso.
Durante las transmisiones en vivo señalaban que personas de otros pabellones buscaban ingresar al Pabellón 2, para lo cual habían derribado paredes y forzado puertas.
La Policía Nacional activó el protocolo de seguridad para intervenir en la Penitenciaría del Litoral con cuerpos de élite, aunque no ha precisado si se ha retomado el control del reclusorio.
Masacre en la Penitenciaría: presos suplican por ayuda; se reportan más de 50 asesinados
En esa prisión, reclusos que son miembros de bandas rivales vinculadas al narcotráfico y que se disputan el poder sostuvieron choques armados en septiembre que dejaron 119 fallecidos, constituyéndose en la mayor masacre de la historia carcelaria de Ecuador y una de las peores de América Latina.
Desde entonces la violencia no ha parado en ese reclusorio: otros 15 internos han sido asesinados, para un total de 134.
Las revueltas carcelarias en todo Ecuador dejan más de 250 reos muertos en lo que va del año. En febrero, fallecieron 79 reclusos en amotinamientos simultáneos en cuatro centros penitenciarios.