La investigación en torno al asesinato bajo la modalidad de sicariato de un policía de 26 años, el pasado lunes 29 de noviembre en el cantón Milagro, provincia del Guayas, ha revelado nuevas pistas.
El gendarme en servicio activo identificado como Kevin Barreto, acribillado con varios impactos de bala mientras circulaba dentro de su vehículo en una avenida de la ciudadela Las Piñas, al sur de la ciudad, habría estado involucrado con el narcotráfico.
Luego del ataque, agentes policiales llegaron hasta la escena del crimen y llevaron a la víctima hasta el hospital León Becerra donde se confirmó su muerte. El occiso tenía orificios de entrada y salida en el flanco derecho de la región abdominal y en el tórax, según el informe médico.
Según indicó la Policía, Barreto se dirigía hasta su lugar de trabajo. No obstante, en su vehículo se encontró un fajo de billetes, que sumaba alrededor de $ 2.058.
Además, luego de las diligencias legales correspondientes, el fiscal Marcos Escobar dispuso el allanamiento de cuatro inmuebles, incluido el del occiso; en este último se decomisaron teléfonos celulares y una balanza electrónica.
De acuerdo a las declaraciones de una pareja sentimental de Barreto, la noche anterior el policía no durmió en ese domicilio como acostumbraba hacerlo.
"Yo sospechaba que andaba en cosas raras, ya que últimamente en el carro tenía fajos de billetes de 100 y 20 dólares. Incluso el 21 de noviembre al regresar a la casa, en la cama encontré dos bloques de droga. Discutimos y le pedí que se llevará eso; no quería que me involucre a mi, ni a mi hijo en sus cosas”, confesó la mujer.
También se conoció que hace ocho meses, Barreto había sido separado de la Unidad Antinarcóticos del Guayas y había sido trasladado a otro departamento de la misma institución.
El asesinato quedó grabado en un video en el que se observa que un vehículo dorado sin placas se detiene frente al auto blanco conducido por el agente de la policía. Inmediatamente, dos sujetos armados, uno de ellos con fusil, descienden del vehículo dorado y comienzan a dispararle varias veces al uniformado.
Tras asesinar al gendarme en servicio activo, los antisociales se subieron al vehículo y escaparon a toda velocidad.