El director del Centro de Inteligencia y encargado del Servicio Nacional de Privados de Libertad (SNAI), Fausto Cobo, dio detalles sobre las operaciones de la Policía y las Fuerzas Armadas dentro del Centro de Privación de Libertad Guayas Número 1, conocido como "La Penitenciaría de Guayaquil".
El operativo arrancó la mañana del lunes 15 de noviembre y contó con la participación de "cerca de mil efectivos", unos 500 de la Policía y una cifra similar de militares.
En entrevista con Ecuavisa, el funcionario informó que las fuerzas del orden han tomado el control del denominado "corredor de la muerte", pero reconoció que aún faltan los pabellones.
"Este momento, hasta anoche que salí de la Penitenciaría, estaba bajo control el 'corredor de la muerte', sobre el tumbado de los pabellones, el perímetro interno donde están los militares y policías, falta tomar el control de los pabellones", indicó Cobo.
Al ser interrogado sobre en cuánto tiempo se va a tomar el control de los doce pabellones, el titular del SNAI dijo que no podía dar una fecha, pero que a su criterio sería lo más pronto posible.
Además, informó que en la madrugada se rescató de uno de los pabellones, escenario de la última masacre, a tres personas privadas de la libertad (ppl) que estaban secuestradas.
Según indicó Cobo, se deberán reclasificar a los presos más violentos: “llevarlos a cárceles donde no puedan realizar lo que están haciendo”.
El Gobierno anunció este lunes que aprobará unas normativas para que la fuerza pública pueda garantizar el uso progresivo de la fuerza, con el objetivo de encarar asuntos como la crisis carcelaria, que el pasado sábado dejó más de sesenta reos muertos.
En un mensaje a la nación, el presidente Guillermo Lasso, dijo que para garantizar que "la fuerza pública cuente con las herramientas necesarias para la defensa ciudadana y el control de los sistemas carcelarios", se aprobarán "normas para el uso progresivo de la fuerza", que no explicó.