Hace algunas semanas, se conoció el caso de una familia quiteña que perdió a uno de sus integrantes a causa de un derrame cerebral. Ellos llamaron a una ambulancia, pero nunca llegó. Por el contrario, casi media hora después, comenzaron a contactarlos para ofrecerles servicios funerarios.
Esto causó una serie de reacciones en redes sociales y cambios dentro del ECU 911. Bolívar Tello abandonó la dirección general y ahora asumió el cargo la abogada Ana María Ayala Robles.
Bajo esta nueva administración, la entidad informó que presentó una denuncia en la Fiscal Provincial de Pichincha “para que se investiguen los hechos en los cuales podrían estar inmersos los organismos que articulan con esta institución”, dice un comunicado emitido este martes.
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Agregó que el ECU 911 se encuentra realizando las gestiones pertinentes para agilizar las diligencias con los entes encargados de impartir justicia “para que estos casos no queden en la impunidad, se sancione a los responsables con todo el rigor de la ley y se garantice que estos hechos no se vuelvan a repetir”.
El servicio también se comprometió con el Ministerio Público a aportar con documentos, fichas de registro, audios o videos para las investigaciones e impulsos de las causas iniciadas o que se entablen por estos acontecimientos.
Finalmente, la institución pide a la ciudadanía que denuncie estos casos ante las autoridades.