La peligrosa secuela que el covid-19 dejó en la cantante mexicana Yuri
La cantante Mexicana Yuri reveló que tras haber tenido covid-19 el año pasado, las secuelas aún la atormentan.
La cantante mexicana Yuri reveló que aún sufre las secuelas del Covid-19. Hace un año, la artista enfermó y hasta el momento tiene síntomas asociados al virus. Indicó que los médicos le diagnosticaron disautonomía, una condición que afecta a los nervios que regulan funciones imprescindibles del cuerpo humano.
La intérprete de "Maldita Primavera" explicó que ella hace poco se enteró de que tuvo Covid-19 porque le dio muy leve. Incluso llegó a confundirlo con una alergia. No obstante, las secuelas feron lo peor.
"Vinieron unas secuelas, me venían unos ataques de ansiedad terribles a las 6 de la mañana, con unas taquicardias que decía: '¿Cómo me quito esto?, ¿cómo hago por esto?, ¿qué es lo que me está pasando?’", dijo la cantante, según Los Angeles Time.
El Sistema Nervioso Autónomo (SNA) controla la presión arterial, la digestión, la temperatura del cuerpo, dilatación de las pupilas, frecuencia cardiaca, entre otras funciones. Es precisamente la que tiene que ver con el corazón aquella que más presenta molestias para Yuri, pues señaló que el corazón empieza a latirle fuertemente con tan solo realizar trabajos físicos ligeros.
Normalmente esta condición suele presentarse en personas con inicios de la enfermedad de Parkinson, artritis reumatoidea y ahora, efectos a largo plazo del covid-19. Otras complicaciones ocasionadas por la disautonomía son mareos, desmayos, taquicardia y que el corazón lata en una frecuencia muy baja.
Para la disautonomía no hay cura, pero se puede tratar con un cambio de dieta, ejercicios y fármacos. Los expertos del hospital de Mount Sinai, en Nueva York, desarrollaron una Terapia de Condicionamiento Autonómico para ayudar a los pacientes con disautonomía a reducir la fatiga. El método ya ha sido adaptado a 53 centros terapéuticos de Nueva York.
El método, según la BBC, consiste en una serie de ejercicios aeróbicos que van progresivamente volviéndose más pesados, pero nunca sin superar el 85% de la frecuencia cardiaca. El procedimiento ha sido efectivo para tratar el Síndrome de taquicardia ortostática postural o POTS.
“Una de las tendencias interesantes que he visto en muchos de los pacientes con covid de larga duración que he tratado es que anteriormente eran muy activos y, durante el tiempo de su enfermedad aguda, estaban acostados en la cama o eran principalmente sedentarios. Ese período de inactividad puede ser un factor que contribuya al patrón de disautonomía posterior a la covid, porque sabemos que eso puede suceder con el desacondicionamiento”, explicó la cardióloga y especialista en tratamiento de disautonomía del Hospital Mount Sinai, Amy Kontorovich.
Hasta el momento no se sabe por qué hay personas que presentan secuelas del covid más fuertes que otras. El ‘covid de larga duración’ sigue siendo un misterio, aunque hay varias teorías. Según la BBC, algunos expertos apuntan a que pequeñas porciones del virus se quedan activos en el sistema.
Otros, lo ven como una respuesta autoinmune a la infección inicial. Algunos creen que el cuerpo termina dañando el endotelio vascular, que regula la sangre y los tejidos del organismo; o una reactivación de una serie de virus que han permanecido inactivos durante mucho tiempo.
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