Este 5 de junio se celebra el Día Mundial del Medio Ambiente justo cuando la humanidad pasa por una circunstancia histórica: la pandemia del covid-19, crisis sanitaria que ha demostrado lo desastrosas que pueden ser las consecuencias de la pérdida de ecosistemas.
“Al reducir el área de hábitat natural para los animales, hemos creado las condiciones ideales para que los patógenos, incluidos los coronavirus, se propaguen”, reza un comunicado de las Naciones Unidas emitido este sábado.
Ante este panorama, la organización recomienda a los países centrarse en la restauración de ecosistemas con el lema “Reimagina, recrea, restaura".
ONU explica que restaurar los ecosistemas significa prevenir, detener y revertir este daño, “pasar de explotar la naturaleza a curarla”.
Precisamente en este día, arranca el Decenio de las Naciones Unidas sobre la Restauración de Ecosistemas (2021-2030), una misión global para revivir miles de millones de hectáreas, desde bosques hasta tierras de cultivo, desde la cima de las montañas hasta las profundidades del mar.
“Solo con ecosistemas saludables podemos mejorar los medios de vida de las personas, contrarrestar el cambio climático y detener el colapso de la biodiversidad”.
La restauración de bosques es esencial pues cada vez son menos hectáreas, de hecho, ONU estima que cada tres segundos, el mundo pierde una superficie de bosque equivalente a un campo de fútbol y, tan solo en el último siglo, se destruyó la mitad de los humedales.
Además, el 50% de los arrecifes de coral ya se han perdido y para 2050, podrían desaparecer hasta el 90%, incluso si el calentamiento global se limita a un aumento de 1,5°C.
La humanidad está en un punto donde ya no puede permitirse más contaminación y pérdida de los ecosistemas.
“Las emisiones globales de gases de efecto invernadero han aumentado durante tres años consecutivos y el planeta está a un paso de un cambio climático potencialmente catastrófico”, reza el comunicado.
Agregaron “la restauración de los ecosistemas es una tarea global de una escala gigantesca. Significa reparar miles de millones de hectáreas de tierra, un área mayor que China o Estados Unidos, para que la gente tenga acceso a alimentos, agua potable y empleos”.
También significa evitar la extinción de plantas y animales, desde las cimas de las montañas hasta las profundidades del mar.
Pero no solo es tarea de los Gobiernos, también se pueden hacer cambios con pequeñas acciones como: cultivar árboles, reverdecer las ciudades, repoblar los jardines con especies silvestres o limpiar la basura de los ríos y costas.
La restauración de ecosistemas beneficiará a todas las sociedades, las Naciones Unidas estima que por cada dólar invertido en restauración, se pueden esperar al menos entre siete y treinta dólares en ganancias para la sociedad.