El atentado para asesinar al Papa Francisco que fue frustrado por una alerta de la inteligencia británica
En su autobiografía, relata cómo los servicios de inteligencia británicos lo informaron sobre los planes de los elementos atacantes: una mujer terrorista suicida y una furgoneta cargada de explosivos.
En su autobiografía, Hope ("Esperanza"), que será publicada el 14 de enero de 2024, el Papa Francisco relata cómo un intento de asesinato en su contra durante su visita a Irak en marzo de 2021 fue evitado por una alerta de los servicios de inteligencia británicos.
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El atentado, que iba a ser llevado a cabo por por dos terroristas suicidas, estaba previsto a ocurrir durante un acto en el que el pontífice iba a participar en Bagdad.
Según el Papa, al aterrizar en la capital iraquí, fue informado sobre la amenaza inminente. Los dos atacantes habían sido interceptados y abatidos antes de que pudieran llevar a cabo su plan.
La intervención, explica, fue posible debido a la cooperación entre los servicios de inteligencia británicos y la policía iraquí, quienes actuaron rápidamente al recibir el aviso.
La visita de Francisco a Irak, la primera de un Papa a este país en la historia, se llevó a cabo en un contexto de extrema tensión.
La violencia sectaria entre musulmanes chiítas y sunitas había alcanzado niveles alarmantes en los años previos, y el país aún sufría las secuelas del impacto del grupo Estado Islámico (ISIS).
La comunidad cristiana, que en otro tiempo floreció en Irak, se había reducido drásticamente, en gran parte debido a las persecuciones y atentados de los extremistas sunitas.
El Papa Francisco, a pesar de las advertencias de quienes le desaconsejaron el viaje debido a los riesgos de seguridad, sintió que su presencia en Irak era necesaria, según cuenta en el libro, del que se revelaron extractos recientemente.
Próxima autobiografía
En su autobiografía, relata cómo los servicios de inteligencia británicos lo informaron sobre los planes de los atacantes: una mujer terrorista suicida que se dirigía a Mosul con la intención de inmolarse, así como una furgoneta cargada de explosivos que también iba hacia el lugar del evento.
El día siguiente a la recepción de esta información, el Papa Francisco preguntó a un alto funcionario de seguridad sobre el destino de los terroristas.
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La respuesta causó un profundo impacto en el sumo pontífice. Fue breve, pero clara: "Ya no están". La policía iraquí había logrado interceptarlos y neutralizarlos antes de que pudieran llevar a cabo su ataque.
El libro Hope, que se publicará en 100 países, se adentra también en otras experiencias personales de Jorge Bergoglio, como su tiempo en las villas miseria de Buenos Aires y la "flecha al corazón" que representó su visita a Irak.
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