"No nos consta si el cuerpo de mi papá es el que reposa en el cementerio"
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!["No nos consta si el cuerpo de mi papá es el que reposa en el cementerio"](http://www.vistazo.com/binrepository/720x960/0c264/720d432/none/12727/QDLI/ochoa_carlos_alberto_VI191431_MG8841532.jpeg ""No nos consta si el cuerpo de mi papá es el que reposa en el cementerio"")
* Este testimonio forma parte del especial de Vistazo.com dedicado a quienes fallecieron a causa de la pandemia y cuyos cuerpos desaparecieron por una cadena de negligencias durante los meses más críticos de la emergencia sanitaria en Guayaquil. Fueron más de 200 los cuerpos que tras su último aliento, no pudieron descansar en paz.
"A nosotros no nos consta si el cuerpo de mi papá es el que reposa en el cementerio", señala Karen Ochoa. Ella busca a su papá.
Y añade: "Yo quiero que asome el cuerpo de mi papá para poder reconocerlo personalmente y llevarlo a su bóveda".
Su padre Carlos Alberto Ochoa Córdova falleció a los 62 años. La última vez que supieron de él fue cuando ingresó al Hospital del Guasmo el 8 de abril y en la madrugada del día siguiente falleció.
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Mientras realizaba los trámites en el Registro Civil y en el Cementerio General, en donde su padre tenía una bóveda, Karen, una de sus tres hijos, se enteró que el cuerpo de su papá lo habían llevado al cementerio de Pascuales sin su consentimiento.
"Con toda la negligencia que ha habido sobre el manejo de los cadáveres, a mí no me consta que sea mi papá el que esté enterrado ahí", señala Ochoa.
Su papá era hipertenso y diabético. "Creo que a mi papá solo le pusieron oxígeno porque desde mi casa salió con un tanque de oxígeno".
Acudieron inicialmente a un centro de salud, pero ahí lo derivaron al Hospital del Guasmo.
"Por la desesperación y la esperanza de que los médicos lo salvaran, lo llevamos allá, pero no fue así".
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