La Inteligencia Artificial (IA) es una ciencia, que cada vez más, gana terreno en actividades humanas. Con ciertas herramientas se pueden crear textos o imágenes en minutos, lo que avizora un futuro incierto para algunos profesionales que podrían ser reemplazados.
Un estudio de OpenAI, empresa detrás del ChatGPT, en colaboración con la Universidad de Pennsylvania, publicó un informe, en el que advierten que “alrededor del 80% de la fuerza laboral de los Estados Unidos, podría tener al menos el 10% de sus tareas laborales afectadas por la introducción de GPT”.
Mientras que el 19% de los trabajadores podrían ser perjudicados en al menos el 50% de sus tareas, lo que reduciría los salarios. Según la investigación, los empleos de mayores ingresos están más expuestos a este fenómeno.
De hecho, el Foro Económico Mundial tiene una perspectiva desalentadora. Estima que en los próximos cinco años se perderán hasta 85 millones de empleos por el avance de la IA.
Por su parte, Aminael Sánchez, docente de innovación digital y tecnologías exponenciales en la Escuela de Negocios de la UTPL, considera “muy poco probable que una profesión desaparezca en su totalidad”.
Menciona que ciertas actividades o tareas repetitivas serán cedidas a las nuevas tecnologías, pero habrá una convivencia entre humanos y máquinas, como un sistema híbrido.
Lo cierto es que todas las profesiones serán alcanzadas por la inteligencia artificial en mayor o menor medida, según prevén los expertos.
Si nos centramos en los trabajos que van a ser impactados en cuanto a procesos que dejen de hacer los humanos y empiecen a asumirlos la inteligencia artificial, se puede mencionar a las profesiones relacionadas con leyes, contabilidad, digitadores de datos, analistas financieros, técnicos de mantenimiento e incluso docentes.
También lo relacionado con las comunicaciones y escritura de textos como periodistas, diseñadores gráficos, marketing e investigadores.
Así mismo, en algunos países ya se puede evidenciar que las máquinas han reemplazado a cajeros de supermercados, conductores de taxi o autobús, personal de almacén y atención al cliente.
A continuación, presentamos la lista completa de profesiones que serán perjudicadas por la inteligencia artificial, según el informe de OpenAI: matemáticos, contadores, escritores, diseñadores de interfaces web y digitales, taquígrafos de la corte, traductores, correctores de redacción y estilo, redactores de copys, auditores, analistas de noticias y asistentes administrativos.
“Las ocupaciones enumeradas son aquellas en las que estimamos que las GPT y el software impulsado por GPT pueden ahorrar a los trabajadores una cantidad significativa de tiempo en la realización de una gran parte de sus tareas, pero esto no sugiere necesariamente que sus tareas puedan automatizarse completamente mediante estas tecnologías”, recalca OpenAI.
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El docente Aminael Sánchez recuerda que esta tendencia no es nueva, ya que se viene pavimentando el camino desde los años 90 con las competencias de ajedrez entre humanos y máquinas.
“Aprendimos que las máquinas nos superan en estrategia a corto plazo, pero el humano sigue teniendo un desempeño mucho mayor cuando se trata de programar una estrategia a largo plazo. Por lo tanto, todas aquellas profesiones que involucren la toma de decisión del humano para crear estrategias a largo plazo creo que serán irremplazables”.
Por su parte, el análisis de OpenAI concluye que las habilidades científicas y pensamiento crítico tienen menos probabilidades de verse afectadas por la inteligencia artificial.
Así mismo, aquellos trabajos que no requieren una formación académica y que están basados en la fuerza física de una persona, tales como: operadores de equipos agrícolas, atletas y competidores deportivos, mecánicos automotrices, albañiles, cocineros, meseros, instaladores y reparadores de líneas eléctricas, carpinteros, pintores, plomeros, carniceros, mataderos y empacadores de carne, etc.
Con la llegada de la inteligencia artificial, algunos empleos podrían verse perjudicados, pero también surgirán otros nuevos. Es el caso del ingeniero de prompts que se encarga de perfeccionar las instrucciones escritas por los usuarios para que el chatbot genere una respuesta acertada.
Sería como un intermediario, esencial para el desarrollo de la IA, porque no siempre las personas escriben información precisa y para usar esta nueva tecnología es necesario realizar indicaciones claras.
Según el portal Bloomberg, el ingeniero de prompts es un trabajo muy demandado en empresas de tecnología e incluso se han ofertado sueldos de hasta los 335.000 dólares al año.
Por su parte, el portal ABC le consultó directamente a la IA, cuáles son las profesiones que se crearán a partir de esta tecnología y dio las siguientes respuestas: desarrollador de aplicaciones, experto en seguridad de la información, diseñador de interfaces de usuario, desarrollador de algoritmos, ingeniero de software, diseñador de sistemas, investigador de inteligencia artificial, operador de chatbot, desarrollador de sistemas de reconocimiento de voz, etc.
Y es que se dice que si bien la mayoría de personas podría acceder a la inteligencia artificial, solo un pequeño porcentaje sabe sacarle provecho, porque no todos tienen la habilidad de generar comandos o peticiones exactas.
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Aminael Sánchez, profesor de innovación digital y tecnologías exponenciales en la Escuela de Negocios de la UTPL, señala que actualmente en el sistema académico hay un debate: ¿Ser generalista o especialista?
Tras la revolución industrial, la humanidad empezó una experiencia formativa hacia la especialización. Surgieron aquellos ingenieros específicos en ciertos procesos, pero tras la irrupción de la IA, eso podría cambiar.
“¿Eso sigue siendo necesario o es mejor tener una formación generalista, que tu viaje por la educación superior te permita ver muchos temas, tener una visión holística del mundo?”
Sánchez explica que quizás en el futuro se necesiten personas que logren conectar puntos o conceptos entre distantes disciplinas. Es decir, los generalistas, los que aprenden de todo un poco.
“Por lo tanto, mi sugerencia para un adolescente es que experimente con muchas áreas de conocimiento y tengan una formación generalista y no siga esta ruta tradicional de la maestría y el doctorado hacia algo muy especializado”.
Aunque para ello habría que replantear el sistema educativo superior. "¿Están nuestras universidades preparadas para eso? ¿Están ofreciendo planes de estudio generalistas? La respuesta es no".