Tecnología, presente en logística e infraestructura farmacéutica
Modernos centros de almacenamiento y distribución, así como flotas vehiculares con sensores de temperatura y humedad forman parte de la logística farmacéutica.
La logística farmacéutica juega un papel fundamental en el sistema de salud, pues permite realizar en condiciones especiales el almacenamiento, transporte y distribución de medicinas hasta su llegada a las cadenas de comercialización y el consumidor final.
Con el aumento en la demanda de productos, los procesos operativos de este sector han debido adaptarse a escenarios complejos, por lo que la automatización y eficiencia han sido claves para el manejo de los fármacos.
El Centro de Distribución (CEDIS) de Corporación GPF, por ejemplo, fue el primero en el país en tener una operación logística automatizada. Desde sus instalaciones en Amaguaña, Quito, se distribuyen medicamentos, artículos de higiene, alimentos y otros, a todas las cadenas de farmacias Fybeca y SanaSana a nivel nacional.
Guillermo Araque, gerente de cadena de abastecimiento de Corporación GPF – FEMSA, comenta que el CEDIS es administrado por Provefarma y que a diario despacha cerca de 500 pedidos y más de 77.000 productos en 800 puntos de venta. “Cuenta con una trazabilidad del 99 por ciento de los productos despachados al punto de venta y laboran cerca de 300 personas en dos turnos”, resalta.
Su infraestructura tiene un área cubierta de 12.700m2, capacidad para atender 220.000 líneas diarias y almacenamiento de más de 7.000 posiciones pallets y 23.000 ubicaciones picking. Además, posee bandas y transportadores, equipos automatizados, sistemas de control de almacén, servidores, así como con un mapa virtual de temperatura y humedad que monitorea online todo el almacenaje.
Sus proveedores de movilización cumplen con Buenas Prácticas de Transporte (BPADT), sus vehículos son termoventilados y poseen sensores de temperatura y humedad que garantizan la cadena de frío. En el último año, Corporación GPF invirtió 21 millones de dólares, en locales nuevos, remodelaciones, proyectos tecnológicos y mejoras en el CEDIS.
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Otra empresa especializada en brindar soluciones de logística para el manejo de productos farmacéuticos es Asegensa de Grupo DIFARE. Ésta opera desde el Parque Logístico GD en el km. 19½ de la vía a Daule y ofrece servicios de recepción, almacenamiento, preparación, despacho, manejo de cadena de frío, logística inversa, entre otros.
Su gerente, Gustavo Almeida, detalla que tienen una bodega de 5.664m2, capacidad para almacenar 7.224 posiciones pallet y una cámara fría de 200m3 con 300 posiciones, las cuales son monitoreadas en línea y en tiempo real para que la temperatura sea la adecuada.
“Vamos a crecer a otra nave de 5.664m2 y así llegar a tener 14.448 posiciones pallet, tomando en cuenta que el Parque Logístico GD tiene una capacidad de 80.000m2 de bodegas”, anuncia.
Adicionalmente, la flota vehicular de la empresa está conformada por 150 unidades de diferente tonelaje que cumplen la normativa BPADT, rastreo satelital y control de temperatura.
A decir de Almeida, la logística farmacéutica es una de las más complejas, debido al estricto control y parámetros técnicos que se deben aplicar, ello sumado a que “con la nueva normalidad es necesario cumplir rigurosamente con los plazos de entrega y estar preparados para situaciones de emergencia y alertas sanitarias”, revela.
Con él coincide Karen Aguilar, encargada de las relaciones públicas de Transportes y Servicios Asociados Sytsa, quien señala que esta logística debe garantizar rigurosos controles de temperatura, evitar roturas y estar en capacidad de protegerse contra robos.
Por ello, asegura que la tecnología es primordial en este proceso, sobre todo para recopilar y analizar datos, patrones y tendencias que podrían reducir costos y dar oportunidades para mejorar el servicio.
Esta compañía, con más de 30 años en el sector, tiene su base de operaciones en Quito y posee alrededor de 600 posiciones pallets para almacenamiento de producto refrigerado y 600 para producto seco. “Contamos con campamentos en Guayaquil, Quito y Tulcán a nivel nacional con más de 3.000m2 en total para almacenamiento, carga y descarga, y demás”, puntualiza Aguilar.
Su flota tiene certificación BPADT y se compone de 120 camiones con capacidades de 3.5 a 35 toneladas, los cuales son monitoreados a través de una torre de control donde se hace el seguimiento de la trazabilidad y temperatura en tiempo real.
En los últimos tres años, Sytsa ha invertido al menos cuatro millones de dólares en equipos de frío, remolques, unidades de carga, infraestructura y capacitación al personal para el manejo adecuado de las cargas.
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