Las piladoras, representadas por la Corporación de Industriales Arroceros del Ecuador (CORPCOM), formularon un llamado urgente al Gobierno nacional para que tome decisiones técnicas ante la situación del sector.
Indicaron que, si finalmente el Estado no va a importar arroz en cáscara para que las piladoras puedan seguir trabajando, al menos otorguen de manera inmediata permisos de importación a la industria arrocera y no a otros sectores sin experiencia y ajenos a la cadena agro productiva.
Desde junio pasado, el mercado ecuatoriano experimenta un aumento significativo en el precio del quintal de la gramínea. Los comerciantes argumentan que hay desabastecimiento, lo cual empuja al encarecimiento del producto.
La situación afecta a los hogares del país, pues la libra de arroz llega hasta los 70 centavos de dólar en los mercados y las tiendas de barrios (anteriormente se vendía a 40 centavos), mientras que en los supermercados el precio es superior.
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Según las piladoras, el campo ha sufrido un invierno fuerte que ha afectado las cosechas de arroz, y estando a puertas de enfrentar un fenómeno de El Niño, el gremio pilador a principios de junio pidió formalmente que el gobierno permita la importación de arroz en cáscara (materia prima) con el fin de atender las distintas demandas de los consumidores y que la industria arrocera siga funcionando.
Es importante resaltar que las piladoras no están de acuerdo con la importación de producto terminado (arroz pilado), porque esta acción dejaría sin trabajo a las 100.000 familias que dependen de esta labor, trabajo rural que no puede verse afectado.
Las piladoras participarán de este proceso de importación de producto terminado (arroz pilado) por la urgencia nacional y la responsabilidad social; sobre todo porque se indicó que es la única importación que se realizará en estas condiciones.