Las pequeñas y medianas empresas (pymes) es uno de los segmentos productivos más afectados por el impacto del COVID-19, debido a la reducida liquidez que tienen para afrontar semanas sin facturación o retrasos prolongados para el pago de sus clientes.
De acuerdo con el marco normativo,
una pymes factura entre 100.001 y 1’000.000 de dólares anuales, y representa casi el 40 por ciento del tejido empresarial ecuatoriano, con un peso importante en la generación de plazas de trabajo.
Justamente, por este protagonismo en la economía nacional, se busca la reactivación de este grupo de empresas a través de líneas de financiamiento.
Un ejemplo de ello es el crédito por 20 millones de dólares que el FMO, Dutch Entrepreneurial Development Bank otorgó a Banco Internacional en Ecuador, cuyos fondos permitirán incrementar el financiamiento para pymes y desarrollar una estrategia de créditos verdes específica para este segmento.
Los proyectos sostenibles que se podrán financiar estarán dirigidos a energía renovable y eficiencia energética.
“Para Banco Internacional es importante mantener nuestra posición de liderazgo en el financiamiento del sector productivo aportando nuestra experiencia, solidez, calidad y compromiso ambiental al momento de invertir en el sector empresarial ecuatoriano. Además, prevemos seguir contribuyendo al desarrollo económico del país, penetrando en el segmento Pymes y apoyando a las empresas en proyectos e iniciativas sostenibles” afirmó Francisco Naranjo, presidente ejecutivo de Banco Internacional.
En la actualidad,
más del 80 por ciento de la cartera crediticia de la institución se destina al sector comercial y empresarial.
Además, con esta operación contribuye potencialmente a cuatro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas: Energía asequible y no contaminante (ODS 7), Trabajo decente y crecimiento económico (ODS8), Industria, innovación e infraestructura (ODS 9), Producción y consumo responsables (ODS 12) y Acción por el clima (ODS 13).