Grupos criminales vinculados al narcotráfico se infiltraron en dos entidades municipales claves para la legalización de tierras en Durán. A través de un complejo sistema de corrupción, los funcionarios municipales, atrapados entre la coacción y la ambición, se ven forzados a colaborar con una estructura delictiva que ha convertido al tráfico de tierras en la columna vertebral de sus operaciones.