La escena, en la que ambos aparentemente emulaban un paseo entre un perro y su dueño, fue captada en video y replicada en diversos medios locales, hasta el punto en que se tornó viral y acumuló miles de reacciones en redes sociales.
El hombre que avanzaba al margen de la calle con sus palmas y rodillas también fingía intentar morder a la mujer, quien, fiel a la actuación, retrocedía de forma vivaz y regañaba al sujeto tal como lo haría con un animal, alzando su voz y tensando la cuerda que lo mantenía unido a ella.
El video no sobrepasa el minuto cuando acaba. En el extracto del insólito incidente que fue observado por internautas gracias a una persona que grabó se nota que una ciudadana se detiene unos segundos al lado de la joven y le habla. Las otras personas presentes se limitaron a mirar y comentar al respecto.
@tania_lopez_segrelles Respuesta a @Adry ♬ Monkeys Spinning Monkeys - Kevin MacLeod & Kevin The Monkey
La publicación original de la grabación, realizada en la plataforma TikTok el 24 de noviembre, ya acumula más de dos millones de visualizaciones y decenas de miles de comentarios, que cuestionan si la simulación correspondía a alguna clase de proyecto social o si, en cambio, el hombre hallaba placer en sentirse humillado.
Vea también: Hombre murió mientras bailaba en plena fiesta en Iquitos
Otro de los debates desatados tras la viralización del video aborda el cambio que probablemente se habría observado en el comportamiento de los testigos si la mujer hubiera sido quien fingiera ser el animal.
La mayoría de personas de la sección de comentarios opinó que, en ese caso, ciudadanos e incluso agentes de Policía hubieran intervenido para interrogar al sujeto y obligarlo a detener el acto.