Policía herido por delincuentes en Quito atravesó compleja operación de 6 horas
Geovanny Herrera, el policía herido, tuvo que ser sometido a una operación de seis horas porque la bala le rozó el cráneo, según indicó su esposa.
El pasado domingo 13 de junio, se registró un ataque con armas de fuego contra dos policías en el sector de Guamaní, al sur de Quito. Producto del siniestro, el Sargento Primero de Policía, Jorge Fernando Chiliguano Medina, falleció y su compañero, Geovanny Herrera, se encuentra internado en terapia intensiva en el hospital de Quito.
Las investigaciones policiales detallan que los dos uniformados se trasladaban en una patrulla por las calles Fenicio Angulo y Duchicela, cuando fueron interceptados por dos personas en una moto, que dispararon contra ellos. Herrera fue trasladado de emergencia a la casa de salud, pero Chiliguano murió inmediatamente.
Mientras las labores de búsqueda han dado como resultado la captura de tres personas vinculadas al crimen, en Los Ríos; Herrera pasó por una compleja cirugía. Su esposa, Jessica Tercero, reveló en una entrevista con El Comercio, que se enteró de lo sucedido porque compañeros de su marido la llamaron.
“Me cayó como balde de agua fría, no podía creerlo. Fue terrible”, dijo al recordar el momento.
Los médicos le indicaron a la mujer que la bala rozó el cráneo de Herrera, por lo que tuvieron que someterlo a una operación que duró seis horas. Afortunadamente esta fue exitosa y el uniformado se encuentra en recuperación, aunque todavía no se sabe cómo reaccionará su organismo pues no ha despertado.
“Solo espero que pronto recupere el conocimiento. Los médicos me dijeron que puede tardar unos cuatro días en hacerlo todo depende de cómo reaccione su organismo”, dijo Tercero, quien además agradeció por todo el apoyo brindado por los compañeros de su esposo, que han estado muy pendientes de su condición de salud.
Herrera, de 26 años, trabaja desde hace cinco años en la Policía Nacional. Se casó con Tercero hace apenas dos años y tiene una pequeña hija. Por su parte, Chiliguano tenía 41 años y llevaba 22 en la policía. Producto de su muerte, sus dos hijas quedaron en la orfandad.
Actualmente las personas detenidas por su presunta participación en el asesinato de Chiliguano se encuentran con prisión preventiva y esta mañana se formularon sus cargos.
“Nuestro compromiso es velar por la seguridad ciudadana y trabajaremos arduamente para que lo ocurrido no quede en la impunidad. Un héroe policial murió en actos de servicio”, comunicó la Policía Nacional.
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