Ecuador desistió de convertir en chatarra 10.000 fusiles que le fueron donados por China en 2016 y que supuestamente tenían problemas técnicos, informó este jueves el nuevo ministro de Defensa, Fernando Donoso.
Quito resolvió "dejar a un lado la decisión o la opinión que se dijo en un momento dado de la chatarrización" de los fusiles AK-47 entregados durante el gobierno del expresidente Rafael Correa (2007-2017), dijo Donoso al medio Ecuavisa.
El armamento será usado "en entrenamiento básico del personal que recién comienza en las escuelas, en los centros de formación de tropa", agregó el ministro de Defensa del gobierno del presidente Guillermo Lasso, que asumió el cargo el 24 de mayo pasado.
Ecuador plantea diálogo con China para decidir destino de fusiles AK-47
Ecuador había planteado en abril pasado la chatarrización de los fusiles durante el gobierno del exmandatario Lenín Moreno, al considerar que el armamento tenía problemas técnicos.
"Estas armas tienen problemas en el disparador, no cuentan con el seguro correspondiente y en su gran mayoría sirven únicamente para personas zurdas", comentó en ese momento el ministro de Defensa de entonces Oswaldo Jarrín.
Tras el anuncio, Quito le propuso a Pekín un diálogo para determinar por mutuo acuerdo el destino de las armas.
Donoso se reunió el martes con el embajador de China en Ecuador, Chen Guoyou. Entre los temas que abordaron estuvo el uso que se dará a este armamento, indicó el Ministerio de Defensa en su cuenta de Twitter.
Los fusiles "han sido distribuidos en las fuerzas para que den el correcto uso en el ejército, la marina y la aviación", señaló Donoso, añadiendo que estos "han estado embodegados, empaquetados".