Un evento que reafirmó la presencia de la monarquía española en medio de una etapa complicada: fue así como se vivió la ceremonia de la mayoría de edad y el juramento de la princesa Leonor. Generando una ferviente atmósfera en las calles, más similar a la de Londres que a la de Madrid.
Junto al cantico de "cumpleaños feliz" de algunos de sus simpatizantes, la heredera de Felipe VI atravesó las calles de Madrid en un Rolls Royce Phantom IV, acompañada por la guardia real a caballo y recibiendo el saludo de aquellos que salieron a las calles. Tras la ceremonia de juramento, se trasladó al Palacio Real para un banquete, seguido de una celebración íntima en familia.
UN RAYO DE ESPERANZA PARA LA MONARQUÍA ESPAÑOLA
El repicar de las campanas de numerosas catedrales españolas marcó el final del juramento, acompañado de salvas de cañón. La fotografía de Leonor decoró las farolas y se repartieron 20.000 banderas españolas y dulces con el emblema nacional en el centro de Madrid.
Tras treinta y siete años, la monarquía comienza a recobrar su prestigio después de afrontar sus momentos más difíciles desde la restauración democrática, principalmente debido a los escándalos que rodearon el fin del reinado de Juan Carlos I, quien abdicó en 2014 y se estableció en Abu Dabi en 2020.
Ausente de las Cortes en esta ocasión, Juan Carlos I se reservó su presencia únicamente para la celebración familiar privada que se llevará a cabo en el palacio de El Pardo.
En el caso de que ascienda al trono, Leonor será la tercera reina en su propio derecho en la historia de España, siguiendo los pasos de Juana I de Castilla en el siglo XVI y de Isabel II en el siglo XIX.
"No soy partidaria de la monarquía, pero el hecho de que sea mujer me hace empatizar un poco más con ella", estimó a AFP Andrea, una chica de 23 años de Pontevedra (noroeste), que fue a curiosear a la Puerta del Sol.
POLÉMICA Y DESCONTENTO EN EL CONGRESO
Quienes no acudieron a la sesión de las Cortes fueron los diputados independentistas y nacionalistas catalanes, gallegos y vascos, quienes hicieron público un manifiesto afirmando que "ni reconocen ni amparan el régimen monárquico español".
Tampoco acudieron tres ministros de la izquierda radical.
Muchos de quienes se congregaron en la Puerta del Sol no dejaron pasar la ocasión de abuchear, con gritos de "traidor", al presidente del gobierno, el socialista Pedro Sánchez, que se halla inmerso en negociaciones con los independentistas catalanes para formar gobierno.
Tampoco fueron del agrado de unos cuantos las breves frases en catalán, gallego o vasco del discurso de la presidenta del Congreso, la socialista Francina Armengol, antes de tomar juramento a Leonor.
Con esta ceremonia, la princesa franquea un hito en su vida institucional. Tras cursar estudios de bachillerato en el Reino Unido, está inmersa en su formación militar, que durará tres años y en la que recorrerá las academias del Ejército de Tierra, la Fuerza Aérea y la Armada.