Cerca de 5 mil autos deportivos de marcas como Ferrari, Lamborghini, Aston Martin, Porsche, Bugatti y BMW fueron abandonados en Dubái el último año. Un problema cada vez más común en el lugar más lujoso del mundo, según reportó 'Informe Motor' en su portal web.
Dubái es sin duda el lugar más lujoso y excéntrico del mundo. Sus grandes reservas de petróleo les permiten a sus habitantes despilfarrar dinero en mansiones, mascotas exóticas y por supuesto, autos lujosos. Podría pensarse que abandonar alguno de esos autos super deportivos es otra de sus excentricidades, pero la realidad es completamente distinta.
Las leyes en Dubái son muy estrictas. Por ejemplo: la multa por no lavar tu auto es de mil dólares. Además, Dubái no ha sido ajena a las últimas crisis económicas y debido a esto, muchos de sus habitantes y extranjeros dejaron deudas en el país, y la pena para los deudores en Dubái es la cárcel.
No es casualidad que muchos de estos lujosos autos fueran abandonados cerca del aeropuerto, incluso, muchos de ellos con las llaves puestas, pues los deudores prefieren perder un auto, que puede llegar a valer medio millón de dólares, y dejar el país, a pasar varios años en una cárcel islámica.
Según las leyes del Medio Oriente, el no pagar una deuda es un delito penal y como los Emiratos Árabes Unidos (uno de ellos Dubái) no tienen leyes de quiebra, por el motivo que sea, no hay protección para retrasos en dichas deudas.
Muchos propietarios pidieron préstamos para comprar estos autos exóticos y con la llegada de la crisis económica, algunos perdieron sus trabajos y no pudieron pagar sus autos, cayendo en deuda y en peligro de ir a prisión. Es por eso que en el último año 4.300 super deportivos fueron abandonados en las calles de Dubái, la mayoría cerca del aeropuerto.
El gran problema para la Municipalidad de Abu Dhabi, es que estos vehículos ocupan importantes espacios en estacionamientos que siguen generando deudas.
Cuando un auto es sospechoso de ser abandonado, los inspectores del gobierno local emiten un aviso de advertencia. Si el propietario no lo reclama dentro de dos semanas, el auto es llevado al depósito de la policía.
Aun dentro del depósito el vehículo puede ser reclamado por un precio menor, pero generalmente son subastados por precios súper bajos. Es así que un Ferrari de 250 mil dólares puede llegar a venderse increíblemente por 2500 dólares.