Con la llegada de los talibanes a Afganistán, miles de personas buscan diariamente abandonar el país. Actualmente, la nación asiática está fraccionada en bandos: el que huye aterrorizado, los talibanes que imponen sus costumbres, y el grupo de guerrilleros que están en contra de los fundamentalistas islámicos. Sin embargo, existe un cuarto grupo, no muy grande, de personas que buscan generar conversaciones entre los dos extremos del conflicto.
En ese punto se encuentra Obaidullah Baheer, un catedrático afgano. Él ha expresado que teme que, si todo el mundo huye de Afganistán, el territorio se convierta en una “caja de resonancia del pensamiento talibán”, según el medio CBC News.
Baheer es profesor de la Universidad Americana de Afganistán y en un artículo en The Economist reseñó que sus temores son fundamentados por una experiencia de vida. En el 2001, él vio las Torres Gemelas caer y creyó que era una gran hazaña de su pueblo musulmán para detener a los enemigos de la religión. Después, su abuelo luchó contra la ocupación estadounidense en Afganistán y su padre fue detenido por el nuevo régimen.
Una vez que entró a la universidad, expandió sus horizontes y se dio cuenta de que el mundo no es blanco y negro, y no solo existen dos posturas en un conflicto. Ahora, él piensa que si la oposición huye del país, muy pocas personas podrán exponerse a nuevas ideas y el país simplemente reproducirá la lógica del pensamiento extremista talibán.
Baheer dijo que él decidió quedarse en Afganistán porque quiere “ayudar a salvar el abismo entre las dos versiones” de su país. Además de eso, hay muy pocos “progresistas” (como él se llama) que hablan el idioma talibán, así que la mediación del conflicto podría tornarse aún más complicada si más gente se sigue yendo del país.
EN EL MEDIO
El catedrático reveló al portal Sky News que actualmente no confía totalmente en la palabra de nadie. Para él, el presidente de EE.UU. Joe Biden mantiene un discurso incoherente. “Lo que escuché en su discurso fue: te golpearé en el estómago y luego te diré las cosas increíbles que hice después de golpearte”, dijo.
Él ha cuestionado por qué la comunidad internacional y Estados Unidos han dejado que “la gente común” negocie con los talibanes, teniendo en cuenta el pasado de la nación. Para él, tras la invasión de EE.UU. en 2001 “hubo una visión del mundo que desarrollaron los afganos”, pero “¿por qué el gobierno, por qué los estadounidenses o la comunidad internacional no asumieron esa responsabilidad y trataron de reconciliar esa visión del mundo?”, preguntó.
"Nos han dejado solos y tenemos que hacer todo esto solos. Después de 20 años he aprendido de la manera más difícil que nunca hubo un buen momento para retirar las fuerzas estadounidenses. Por eso todavía estamos allí”, indicó.