La nave de la compañía Manang Air salió el martes desde las cercanías de Lukla, el punto de entrada para las expediciones para subir al Everest, y se dirigía a la capital, Katmandú, con los cinco viajeros mexicanos y el piloto.
El helicóptero perdió el contacto ocho minutos después de despegar, dijo la Autoridad de Aviación Civil de Nepal (CAAN) en un comunicado.
Los mexicanos eran un matrimonio y sus tres hijos, informó el embajador de México en India, Federico Salas, encargado de recabar información del caso y brindar asistencia a las familias de las víctimas.
"Era una familia de cinco personas que estaban de turistas, se fueron a Nepal", dijo el diplomático a la televisora mexicana Milenio al detallar que un pariente contactó a la embajada desde el estado de Nuevo León (norte).
La empresa Manang Air identificó al piloto como Chet B. Gurunt, de 55 años y con más de 7.000 horas de experiencia de vuelo en la firma desde 2014, dijo en un comunicado de condolencias en Facebook.
El accidente ocurrió en el distrito de Solukhumbu, provincia de Koshi, Nepal, precisó previamente la embajada en un comunicado.
"Los seis cuerpos fueron recuperados y llevados a Katmandú", dijo a la AFP Pratap Babu Tiwari, director del aeropuerto Internacional de Tribhuvan.
Dos helicópteros y varios equipos terrestres fueron desplegados para una misión de búsqueda y rescate pero no pudieron aterrizar cerca del lugar del accidente debido al clima.
"Los equipos en tierra llevaron los cuerpos a los helicópteros que pudieron aterrizar cerca", dijo Tiwari.
Lhakpa Serpa, un residente de la zona que se unió a los esfuerzos de búsqueda y rescate, dijo que el lugar del accidente es "muy aterrador".
"Parece que el helicóptero chocó primero con un árbol y luego se estrelló contra el suelo. Dejó un pequeño agujero en el suelo", dijo.
El primer ministro Pushpa Kamal Dahal expresó su "dolor" por el accidente, dijo su oficina en Twitter.
Nepal tiene una industria de helicópteros privados en auge, que transporta turistas y mercancías a rincones remotos de este empobrecido país del Himalaya, donde el acceso por carretera es limitado o inexistente.
Pero el país es conocido por su escasa seguridad aérea. El incidente del martes es el último de una serie de accidentes de aviación en Nepal.
En mayo una persona murió y cuatro resultaron heridas cuando un helicóptero se estrelló en el este del país después de dejar mercancías para un proyecto hidroeléctrico.
En 2015, durante las operaciones de rescate tras un sismo devastador, hubo múltiples accidentes de helicóptero que se cobraron más de una decena de vidas.
En enero un accidente aéreo en el oeste del país mató a 72 personas, entre ellas una argentina.
El avión, de la compañía Yeti Airlines, se desplomó en un desfiladero, se rompió en pedazos y estalló en llamas cuando se acercaba a la ciudad de Pokhara (centro).