El futbolista argentino Emiliano Sala sufrió "envenenamiento grave por monóxido de carbono" que lo dejó "inconsciente" antes de que el avión que lo transportaba a Inglaterra para sumarse al FC Cardiff City, el nuevo club al que había sido traspasado, se accidentara en el Canal de la Mancha.
Así lo explicó el doctor Basil Purdue en el juicio que se está celebrando en la corte de Bournemouth para esclarecer todos los hechos que ocurrieron en enero de 2019 y que condujeron a la muerte de Sala y del piloto David Ibbotson.
La semana pasada, Purdue argumentó que la causa de la muerte de Sala fueron las "múltiples" heridas en la cabeza y en el torso tras el accidente de avión.
Ahora, ha añadido que antes de su muerte el argentino se envenenó con monóxido de carbono, lo que implicó que estuviera "profundamente inconsciente" antes del impacto en el agua.
Según explicó el doctor, los niveles de monóxido de carbono de las dos muestras analizadas de Sala, una de sangre de la vena iliofemoral y otra de ADN del pecho, mostraron un porcentaje del 58%, lo cual describió como "envenenamiento grave" y apuntó que la fuente de estas emisiones fue el avión.
La justicia británica abrió el martes 15 de febrero un procedimiento para establecer las responsabilidades en el fatal accidente de avioneta.
El cuerpo del jugador, de 28 años, cuya desaparición conmocionó al mundo del fútbol, fue encontrado en el interior del avión, más de dos semanas después, a 67 metros de profundidad.
El cadáver del piloto, de 59 años, nunca fue hallado.
El británico David Henderson, de 67 años, que organizó el vuelo, fue condenado a mediados de noviembre a 18 meses de prisión por contratar a un piloto que sabía que no estaba cualificado y por transportar a un pasajero sin licencia comercial válida.
"Nadie puede devolvernos a Emi (...) Nuestro dolor nunca desaparecerá y siempre estará con nosotros. Lo único que pedimos es que se haga justicia y que no se deje ninguna piedra sin remover para establecer lo sucedido", escribió Mercedes Taffarel, madre de Emiliano.
El juicio sobre la muerte de Sala se estima que durará alrededor de un mes.