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¿Cómo pudo el mundo permitir Auschwitz? Se cumplen 80 años de la liberación y los últimos testigos del Holocausto cuentan sus historias

En ese entonces tenían 15 años, 4 años, siete meses... Algunos sobrevivientes incluso nacieron en los campos de concentración y exterminio.

lunes, 27 enero 2025 - 11:00
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El mundo conmemora ochenta años de la liberación de Auschwitz, el 27 de enero de 1945 por el Ejército Rojo. Este campo de exterminio se convirtió en un símbolo del genocidio perpetrado por la Alemania nazi en el que murieron seis millones de judíos.

El número de judíos supervivientes del Holocausto es de 220.000 personas, según un estudio elaborado por la Claims Conference, publicado este lunes. La inmensa mayoría de estas personas (95 %) son niños supervivientes, nacidos entre 1928 y 1946, la última generación del Holocausto.

Fue construido en 1940 en la localidad de Oswiecim, en el sur de Polonia. Los nazis le cambiaron el nombre a Auschwitz, mientras que los primeros 728 prisioneros políticos polacos llegaron el 14 de junio de ese año.

El 17 de enero de 1945, ante el avance de las tropas soviéticas, los nazis obligaron a 60.000 prisioneros caminar hacia el oeste, en lo que se conoce como la "Marcha de la Muerte".

Del 21 al 26 de enero, los alemanes destruyeron las cámaras de gas y crematorios y se retiraron antes de la llegada de los soviéticos.

Cuando arribaron las tropas soviéticas, el 27 de enero, encontraron a 7.000 sobrevivientes. Esa fecha fue designada por la ONU como Día Internacional en Memoria de las Víctimas del Holocausto.

"Para que la historia no nos olvide"

Varios sobrevivientes de los campos nazis, repartidos por 15 países y cuatro continentes, hablaron con la AFP para recordar lo ocurrido.

En ese entonces tenían 15 años, 4 años, siete meses... Algunos incluso nacieron en los campos de concentración y exterminio: Auschwitz-Birkenau, Bergen-Belsen, Buchenwald, Ravensbrück, entre otros.

Deportada entre la edad de 4 años y medio y los seis en los campos de Vught y Westerbork (Países Bajos) y luego en el de Bergen-Belsen (Alemania), la francesa Evelyn Askolovitch insiste en la importancia de hablar, porque, tal como recuerda, forma "parte de la ultimísima generación" de supervivientes.

"¿Cómo pudo el mundo permitir Auschwitz?", preguntó en Chile Marta Neuwirth, de 95 años. Tenía 15 años cuando fue enviada a Auschwitz desde Hungría.

A Julia Wallach, de casi 100 años, le cuesta hablar de lo ocurrido sin llorar. "Es muy difícil hablar de eso", reconoció esta parisina, que fue sacada de último minuto de un camión que se dirigía a la cámara de gas de Birkenau.

Pero por más difícil que sea revivir esos horrores, afirma que seguirá dando testimonio. "Mientras pueda hacerlo, lo haré", afirmó.

Naftali Fürst tenía apenas 10 años cuando fue llevado con su familia a un campo de concentración, para acabar en Auschwitz en 1944. Fue separado de sus padres y le tatuaron un número en el brazo.

Pero con la llegada de los soldados soviéticos, los nazis decidieron llevar a sus prisioneros de Alemania a Austria en medio de la nieve, en las tristemente conocidas "marchas de las muerte". "Lo peor de mi vida", dice Fürst.

"Es una experiencia indescriptible, un verdadero paso por el infierno. Vimos a mucha gente caer de un lado, heridos, muertos. Los que no podían seguir el ritmo eran asesinados in situ. En momentos así, sobrevivir significa luchar para no quedar atrás".

En Buchenwald, en Alemania, escapó a la muerte gracias a un resistente comunista checo, Antonin Kalina, que sería luego nombrado Justo entre las Naciones, por haber salvado a cientos de niños judíos durante su detención.

Alrededor de 1,1 millones de personas, entre ellas un millón de judíos y también gitanos y resistentes polacos, fueron asesinados en Auschwitz entre 1940 y la liberación del campo por el ejército soviético el 27 de enero de 1945.

La mayoría de los que llegaban murieron gaseados al poco de su arribo al campo de exterminio.

En total, seis millones de judíos fueron aniquilados en Europa por la maquinaria de muerte del III Reich.

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