El Gobierno de Bolivia anunció hoy que militarizó el pueblo de San Matías, fronterizo con Brasil, considerado un municipio peligroso tras una serie de asesinatos, parte de ellos por la violencia del narcotráfico.
El ministro de Defensa, Reymi Ferreira, dijo a los medios que el presidente Evo Morales instruyó la militarización de San Matías para que el Ejército participe en operaciones de seguridad, a petición de la alcaldía, del comité cívico y de legisladores regionales.
Eerreira sostuvo que la militarización durará el tiempo que sea necesario y que los militares actuarán en el marco del respeto a los derechos humanos y en coordinación con la Policía.
De su parte, el ministro de Gobierno, Carlos Romero, dijo a la radio estatal que se trata de una zona en la que se ha producido al menos seis asesinatos en dos meses, además de casos de tráfico de tierras y de minerales, narcotráfico, contrabando y secuestros.
"El común denominador es la droga", dijo Romero.
Según el funcionario, los agentes de seguridad entrarán a San Matías "con tres veces más fuerza" que lo que actualmente existe para coordinar operativos con Brasil en acciones "durísimas y contundentes".
San Matías tiene un población de 15.600 habitantes.
"Allá la presencia del Estado es débil, pero la presencia de la Policía la vamos a triplicar y vamos a ser contundentes en nuestra respuesta", enfatizó Romero.
El viernes pasado, una inspectora de Migración fue asesinada con siete tiros supuestamente por un brasileño familiar suyo, que huyó a su país, sin que se hayan aclarado las razones del crimen.
Varios puntos fronterizos de Bolivia con Brasil son considerados lugares donde se acopia la cocaína boliviana y peruana antes de ser llevada a territorio brasileño, lo que provoca la violencia.