La Misión de Observación Electoral de la Organización de los Estados Americanos (OEA) expresó este miércoles su preocupación por el aumento de la violencia política y el retraso en el escrutinio durante las elecciones de Ecuador del pasado domingo.
La delegación de la OEA, instalada en el país desde el 27 de enero, publicó un informe preliminar sobre los comicios en el que, a pesar de todo, celebra la alta participación electoral, superior al 80 % del censo.
El texto subraya que "uno de los desarrollos más preocupantes" del proceso electoral "fue el aumento de la violencia política, con manifestaciones del crimen organizado en la contienda electoral".
La delegación lamentó que durante la campaña fueron asesinados dos candidatos y dos aspirantes políticos.
Uno de ellos, Omar Menéndez, fue asesinado en la víspera electoral y resultó ganador en las elecciones a alcalde de Puerto López.
"La Misión condena enérgicamente todos los hechos de violencia política acontecidos", expresó el organismo, que advirtió de que estos episodios amedrantan a la ciudadanía para que no ejerza su derecho al voto.
Los observadores electorales también constataron que el proceso de escrutinio "tomó mucho más de lo esperado y en varias mesas observadas no se apegó a lo estipulado en los manuales".
Señalaron que en algunas mesas el conteo se llevó a cabo de forma conjunta entre los diferentes tipos de elección que estaban en juego, en lugar de separarlos en dos grupos de escrutinio como estaba estipulado.
Asimismo, detectaron "falta de capacitación" y "signos evidentes de cansancio" por parte de los miembros de las mesas electorales cuando todavía no había iniciado el llenado de las actas.
La Misión de la OEA hizo un llamamiento a Ecuador para que los episodios de violencia electoral "sean investigados por las autoridades competentes y que no queden impunes".
También recomendó que aumentar los días de capacitación del personal electoral y separar los distintos tipos de elección en diferentes urnas para evitar confusiones.