Nayib Bukele presume dos meses sin homicidios en El Salvador
A través de sus redes sociales, Nayib Bukele, el polémico presidente de El Salvador, publicó datos de la Policía Nacional Civil (PNC) de ese país que evidenciarían una alentadora disminución de crímenes.
De acuerdo con la información publicada el jueves, el país centroamericano llevaría ya dos meses con un registro de cero homicidios. Esto, luego de una ola de asesinatos ocurrida a finales de marzo pasado.
“Julio y agosto 2022 se convierten en los dos meses más seguros de nuestra historia”, acotó por medio de Twitter el mandatario de 41 años.
Sin embargo, sí se ha registrado la muerte de pandilleros en medio de reyertas con agentes de la PNC y militares, pero la entidad policial no registra estos casos como homicidios.
Además, el pasado 3 de agosto, 2 personas -que no fueron identificadas- fueron asesinadas y el 6 de este mismo mes se reportó la muerte de otro salvadoreño, todos civiles, de acuerdo con un fuente citada por El Colombiano.
Asimismo, se desconoce la cifra total de homicidios registrados entre enero y julio de este año, ya que la autoridades de seguridad no las proporcionan.
La escalada de crímenes en marzo empujó a la Asamblea Legislativa a otorgar poderes especiales al Ejecutivo del presidente Bukele. A mediados de agosto se aprobó la quinta prórroga del régimen de excepción.
El estado de excepción suspende los derechos de asociación, reunión, defensa, inviolabilidad de las telecomunicaciones y la intervención de las comunicaciones. Algo que ha sido calificado como supuesta violación de derechos humanos por parte de organizaciones sociales salvadoreñas e internacionales.
Adicionalmente, han alertado que bajo este régimen se han dado detenciones arbitrarias y tortura. Sin embargo, para Bukele, la medida denominada “guerra contra las pandillas”, es una forma de responder al fenómeno de las maras.
Sin embargo, hasta la fecha, no se conoce un plan gubernamental para dar una solución concreta a dicho fenómeno más allá de la cárcel. Estos grupos delictivos han resistido a los planes de seguridad implementados en las últimas cuatro administraciones.
