El bosque nublado del Chocó Andino, ubicado en la provincia de Pichincha, es un templo de la naturaleza por la increíble biodiversidad que guarda en su interior y donde hasta hoy se siguen descubriendo nuevas y fascinantes especies que necesitan de este hábitat para sobrevivir.
A través de un estudio, parte del proyecto EPHI (Ecology of Plant-Hummingbird Interactions), ejecutado en Ecuador por Aves & Conservación, dentro de la Reserva Mashpi, se descubrió recientemente una especie desconocida de planta, nombrada como Columnea floribunda (Clark & Tobar), descubierta por el botánico ecuatoriano Francisco Tobar.
"Este particular ejemplar presenta sus flores debajo de las hojas,¡prácticamente escondidas! Aun así, estas sirven de alimento y son polinizadas por los colibríes, siendo los únicos animales que se alimentan de ellas", detalla un comunicado sobre el descubrimiento.
Las vistosas flores rojiamarillas, así como las puntas rojas de las hojas, sirven como "señales" para los colibríes que, atraídos por estos colores, saben que la recompensa es un dulce néctar, agrega.
Hasta el momento, solo se han encontrado poblaciones de esta planta al interior de la Reserva Mashpi, por lo cual fue categorizada como una especie en peligro de extinción (de acuerdo a los criterios de La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza UICN).
Adicionalmente, gracias al monitoreo de especies con cámaras-trampa ubicadas en la Reserva Tayra, se ha ampliado el registro de especies de ambas reservas. Por ejemplo, se detectó la presencia de un mamífero muy poco visto en esta región; se trata de un felino más pequeño que el tigrillo, conocido como Oncilla (Leopardus tigrinus).
También, gracias a dos estudios de tesis terminados, se registró un nuevo ejemplar de marsupial miniatura y se amplió significativamente la cantidad de especies registradas de murciélagos.
También se ha encontrado 208 variedades de plantas con flor, 63 tipos de orquídeas, 101 ejemplares de plantas leñosas, 13 especies de palmeras, 154 clases de briófitas, 40 tipos de hongos y 16 variedades de líquenes.
De acuerdo con Mateo Roldán, director de investigación de la Reserva Mashpi: "es relevante resaltar la importancia de ampliar el registro de especies ya que esto demuestra la necesidad de conservar zonas como Mashpi, donde existe mucha biodiversidad escondida que debe estudiarse y conocerse. Cuidar nuestra naturaleza, la fauna y flora que habita en ella es necesario, es un deber de todos".