Cada 22 de marzo se conmemora el Día Mundial del Agua, donde se recuerda la importancia de este líquido en las sociedades y la obligación de reducir su escasez para alcanzar el Objetivo de Desarrollo Sostenible #6: Agua y Saneamiento para Todos hasta el 2030.
Bajo este marco, el Gobierno Nacional del Ecuador instaló una mesa técnica en el Parque Nacional Cotopaxi donde presentaron el “Plan del Encuentro por el Agua” que se basa en generar un proceso participativo y garantizar la construcción colectiva de la nueva ley de gestión integrada de recursos hídricos en el país.
Este Proyecto de ley estará desarrollado en tres etapas:
Preparatoria: Se levantará información y se establecerán las alianzas necesarias, mientras se convoca a todos los actores vinculados al “qué hacer del agua''.
Construcción Participativa: Habrán talleres donde instituciones públicas, privadas, organizaciones sociales y gestores del agua podrán dar su opinión para la construcción de la nueva ley.
Etapa Final: Se realizará la sistematización, redacción y socialización del documento final de la ley que se planea entregar en diciembre a la Asamblea Nacional para su aprobación.
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Para este proyecto, el Banco de Desarrollo del Ecuador, otorgará créditos de 290 millones de dólares a los municipios para obras de agua potable y saneamiento. Esto beneficiaría a 2.6 millones de ecuatorianos, además de la creación de cinco nuevas áreas de protección hídricas.
En el evento, el presidente Guillermo Lasso, también señaló que el país cuenta con cientos de fuentes de agua dulce subterráneas y superficiales, pero como efecto del calentamiento global, existe el riesgo de perder esas fuentes de suministro. “En las últimas décadas, por ejemplo, el Volcán Cotopaxi ha perdido más de la mitad de sus nieves por las altas temperaturas. Por eso, debemos mitigar el riesgo de que el agua pueda escasear en un futuro no muy lejano y tenemos la obligación de cuidarla”, declaró.
Mientras, Naciones Unidas hace un llamado a poner el foco de atención en las aguas subterráneas (aguas invisibles bajo tierra) en este 2022. Este tipo de agua alimenta ríos, lagos, humedales y su principal fuente de recarga es la lluvia o nieve que se filtra en el suelo.
“La vida no sería posible sin ellas. La mayoría de las zonas áridas del planeta dependen por completo de este recurso que suministra una gran proporción a fines de consumo, saneamiento, producción de alimentos y procesos industriales”, aseguran los expertos de la ONU. Es por esto que en este día, reivindican el estudio, protección y utilización de aguas subterráneas de forma sostenible para sobrevivir al cambio climático.