El complejo transtorno mental que se presenta en 1 de cada 4 pacientes con Covid
El delirium se presenta en el 25% - 33% de los pacientes covid hospitalizados y hasta en el 65% de los que van a UCI.
Uno de cada cuatro pacientes que son internados por Covid-19 desarrollan trastornos cognitivos como desorientación, alucinaciones y confusión, según estudios publicados en Jama Network y el The New England Journal of Medicine. Los expertos aseguran que esta condición, conocida como delirium, sumada a la inflamación de los órganos internos, puede ralentizar el proceso de recuperación.
El neurólogo chileno, Álvaro Romero, manifestó al portal La Tercera que los pacientes que padecen este cuadro clínico muchas veces alucinan con que se quedaron solos en el mundo o que los tienen secuestrados. “Muchos, cuando ya están en casa, se vuelven a sentir hospitalizados y reviven todos los procesos anteriores de la intubación, de las noches, o del tiempo que estuvieron en cuidados críticos”, agregó.
Estudios internacionales revelan que el delirium se presenta en el 25% - 33% de los pacientes hospitalizados y hasta en el 65% de los que son trasladados a las unidades de cuidado intensivo (UCI). La tercera recogió la experiencia de un hombre que estuvo más de 100 días internado por covid y creía que toda su familia había muerto por el virus, o el de otro hombre que pensaba que sus hijas habían muerto en un accidente de avión y quienes lo iban a visitar al hospital eran familiares que realmente fallecieron en el pasado.
CAUSAS
El delirium no es exclusivo del covid sino que está asociado a enfermedades de gravedad o intervenciones quirúrgicas, pero sí se ha visto una incidencia mayor por el covid y la pandemia. Los expertos creen que existen dos tipos de factores que posibilitan la aparición del delirium: los predisponentes y los precipitantes.
Los primeros se tratan de antecedentes como la edad, el estado mental antes de la hospitalización, alguna discapacidad, adicciones, etc. Los segundos son los efectos secundarios del tratamiento recibido durante la hospitalización, como los fármacos y sedantes. Así, por ejemplo, para tratar el covid se usan altas dosis de corticoides o benzodiazepina. También el hecho de que existe poca movilidad en el cuerpo, los procedimientos invasivos como la introducción de un catéter o una cirugía, enfermedades como la sepsis y la falta de contacto humano debido a las barreras para protegerse del covid.
“En la medida en que más se pierden, que tienen menos consciencia de las cosas, la posibilidad de recuperación va a ser menor o más lenta”, explicó Romero.
El delirium es preocupante porque puede causar problemas en la memoria, la capacidad de concentración, el lenguaje o funciones motoras por un tiempo indefinido. Según el neurólogo, en las clínicas de chile hay pacientes de junio y julio de 2020 que todavía tienen trastornos. Los estudios sugieren que el desarrollo de delirium aumenta 10 veces el riesgo de mortalidad intrahospitalaria, el mismo que se extiende incluso hasta dos años después de haber tenido la condición.
RECUPERACIÓN
Para Romero, la recuperación hospitalaria requiere un equipo multidisciplinario. Es decir, el paciente necesitará tratamiento neurológico, kinestesiólogo, fonoaudiología, evaluaciones psiquiátricas y terapias de rehabilitación. No obstante, el experto cree que la familia es un pilar fundamental para la recuperación.
Otro neurólogo chileno, el Dr. Victor Navia, aseguró al portal que es importante que los pacientes estén en contacto con estímulos visuales y sonoros, que se sientan acogidos y que no haya estrés ambiental.
“Cuando hablamos de apoyo familiar lo hacemos respecto a aspectos básicos que van desde vestirlos o asearlos hasta que todos los días les recuerden en qué fecha estamos, que continúen los programas de ejercicios en casa y que los hagan caminar y moverse, ojalá fuera de la casa en la silla de ruedas, aunque sea cinco minutos”, dijo.
Recomendó armar un espacio tranquilo para los pacientes con sus pertenencias más cercanas e incluirlos en las conversaciones y en las tareas del hogar. Asimismo, cuidar su dieta y sobre todo, mantener la calma en la familia.
“El tiempo de recuperación va a depender de la reserva cognitiva, o sea, de la capacidad mental que tenga y el impacto a nivel de secuelas que deje todo este proceso”, advirtió.
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