Gaby y Enzo se conocieron por medio de la música y se enamoraron al imaginar una travesía musical por Sudamérica. Con sus ahorros compraron una pequeña Van del año 99, la adecuaron durante 4 meses y se lanzaron a la aventura. Empezaron recorriendo Colombia para finalmente llegar a Ecuador, en donde conocieron Quito, Mindo, La mitad del mundo, Manta, Pedernales, la ruta del sol y actualmente Guayaquil.
Siempre cerca de “Pachita” -el nombre de la Van- Gaby y Enzo cantan en las calles, afuera de los restaurantes o en sitio turísticos. Gaby canta y toca el ukulele, Enzo es guitarrista; en la van se complementan: Enzo maneja y Gaby cocina y cose, ¡hizo hasta las cortinas de la Van!
Con “Pachita” las noches son cortas pero la pareja no se queja. Tenemos una hornilla para cocinar y una pequeña ducha. “Con el tiempo hemos regalado y vendido muchas cosas. Más pasa el tiempo más sentimos que tenemos que viajar ligero”, acota Gabriela.
En las noches la joven de 21 años se dedica a escribir canciones, dibujar o realizar videos para las redes sociales y Enzo practica la guitarra. “Era profesor de música en Colombia, en nuestros viajes me gusta poder tocar con la gente de cada país y si puedo enseñar guitarra, bienvenido sea”, añade Enzo.
Desde que llegaron a Ecuador Gaby y Enzo se hicieron virales en redes sociales. Siempre pasa lo mismo, llegan a un lugar, se alistan y cuando las primeras palabras salen de la boca de Gaby, el público se enciende y empieza a filmar.
Esta hermosa angel cantando con una preciosa voz en Montañita. Es colombiana. Su voz hizo que la gente se detenga hipnotizada para contemplar su arte. En redes sociales está como @gabyan_oficial pic.twitter.com/RWOYOrxUEn
— JCPacheco (@jc_buitre) February 20, 2023
Ya sea Shakira, Natalia Lafourcade o Julieta Venegas, la pequeña de Bucaramanga interpreta cada nota con tanto cariño que todos piden más. “Canto también en inglés, aprendo en fonética y voy perfeccionado”, detalla Gaby, cuya versión de Zombie de The Cranberries es digna de escucharse una y otra vez.
Hablar con este par de enamorados es un bálsamo para el alma. Ven la vida como un constante descubrimiento. Disfrutan los placeres pequeños y saben que si siguen amándose a pesar de verse 24 horas al día. viajando en una van minúscula, definitivamente todo es posible.
Pronto viajarán a Perú para seguir su recorrido hasta Ushuaia en Argentina. Serán unos dos años más de aventuras... Despedirse de ellos es desgarrador y me cuentan que este sentimiento es el más presente en sus viajes.
“En Manta una familia nos invitó a su casa unos días y cuando nos fuimos sentimos que dejábamos nuestra familia”, comenta Gaby. “En las noches muchas veces nos reportamos a nuestros nuevos amigos, ya no somos solamente los dos en el viaje”, añade Enzo.