Loja tiene una oferta hotelera diversa
La oferta hotelera de Loja es diversa y se puede encontrar desde grandes cadenas, hasta hoteles boutiques y hostales. Las fiestas de Navidad y fin de año generan altas expectativas para este sector.
El potencial turístico de Loja crece cada año, así como el número de turistas que llegan a este punto del país. El mes pasado, a propósito del Festival Internacional de Artes Vivas, su ciudad capital recibió a más de 17.000 turistas y visitantes, un flujo que dinamizó positivamente al sector hotelero.
Actualmente, la provincia cuenta con sitios de hospedaje que van desde hoteles cinco estrellas, tipo boutique, de corte tradicional, hostales, hosterías hasta residencias. Datos de la Cámara Provincial de Turismo de Loja (Captur) indican que existen alrededor de 5.000 camas. Los precios por pernoctar en estos espacios van desde los 15 a 100 dólares.
Al igual que sus atractivos turísticos la oferta hotelera también se ha ido diversificando. La cadena Oro Verde Hotels, por ejemplo, abrió este año en el centro de la ciudad de Loja su décimo establecimiento. La infraestructura dispone de 39 habitaciones estilo boutique (sencillas, dobles, matrimoniales, triples y suites) con diseño art deco, paredes de mármol, iluminación domótica, conexión wifi de alta velocidad y aislamiento acústico.
Para la comodidad de los huéspedes y clientes dispone también de un salón para eventos corporativos y un business center. Edmundo Kronfle, CEO Hoteles Oro Verde, señala que la propuesta ha tenido gran acogida por el sector corporativo y turístico, sobre todo de Guayaquil, Quito, Cuenca y Machala.
“La ciudad de Loja se caracteriza por su atractivo turístico, su alto nivel cultural y por ser un sector de movimiento industrial importante en Ecuador. Consideramos que es una excelente localidad”, reseña.
Para complementar su oferta, la marca cuenta con The Lounge, un restaurante cuyo concepto reinventa la cocina local e internacional. Su menú está basado en interpretaciones de los favoritos de la gastronomía moderna, tales como la corvina en salsa encocada, salmón en salsa de trufa y el solomillo de cerdo en salsa de café lojano. El mes pasado estrenó una carta que incluye tapas de autor, ceviches y platos de la costa y la sierra ecuatoriana.
En el centro histórico de Loja está también Casa Bolívar Hotel Museo, una casa colonial de dos plantas con 10 habitaciones tipo suite, lobby, restaurante, capilla y varias salas donde los huéspedes pueden descansar, leer o trabajar.
Antes de convertirse en hotel, el edificio pasó por una restauración integral del papel tapiz, pintura mural y tabular. Su administradora, María Gloria Eguiguren, cuenta que se rescató varios espacios de la edificación original.
“Quien visita Casa Bolívar se siente como en casa, en el patio central mantuvimos los árboles originales del jardín...En nuestro hotel museo el visitante puede encontrar una exposición fija con piezas de arte, textiles, obras pictóricas, escultóricas y piezas que eran parte del inmueble y durante el transcurso del año varios artistas realizan exposiciones itinerantes”
La propuesta gastronómica de su restaurante Libertadora Sáenz rescata ingredientes tradicionales de la provincia con un toque de actualidad.
A unas cuadras de esta zona y con más de tres décadas de tradición está también el Hotel Libertador, sus cuatro pisos albergan 51 habitaciones, tres salones, business center, restaurante y parqueadero, oferta que se complementa con el servicio de áreas húmedas como sauna, turco, hidromasaje, piscina, área de niños y spa.
Su restaurante La Castellana ofrece una cafetería nacional, menús tipo almuerzo de una o dos proteínas, así como una carta de comida internacional. Su propietario, Fernando Eguiguren, destaca que para los viajeros que desean tener experiencias en la ciudad y sus alrededores el hotel ofrece paquetes turísticos que incluyen visita en haciendas cafetaleras y actividades de temporada, como recorridos de observación del florecimiento de los guayacanes.
En las calles Bernardo Valdivieso y José Antonio Eguiguren está el Grand Victoria Boutique Hotel, una hermosa propiedad de estilo republicano, que brinda a sus huéspedes un entorno natural y amplias instalaciones. Sus habitaciones cuentan con TV de pantalla plana y tina de baño, además de salones para eventos sociales o corporativos, con capacidad hasta para 200 personas.
El gerente general, Herbert Moreno, destaca que para el descanso y relajación de los huéspedes cuentan con piscina, hidromasaje y turco. Su restaurante Insignia ofrece por su parte una carta que rinde tributo a los sabores lojanos con platos como el queso de Saraguro, granos de pepas de zambo, verde de Catamayo, la infaltable salsa de café lojano bañando filete de salmón, entre otros.
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