Es común encontrar pastillas sueltas o sin nombre en el botiquín de la casa al terminar un tratamiento médico y es habitual no volver a utilizarlas. Con el paso del tiempo, la fecha de consumo expira, convirtiéndose ese medicamento en un riesgo para la salud de las personas y del ambiente.
Por lo tanto, desechar correctamente las medicinas se convierte en una medida esencial para prevenir complicaciones de salud no deseadas.
Datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) indican que, a nivel nacional, en 2019, los establecimientos de salud gestionaron un total de 14,9 millones de kilogramos de desechos sanitarios.
De este volumen, los Gobiernos Autónomos Descentralizados (GAD) Municipales recolectaron el 49,2 por ciento, mientras que el porcentaje restante lo manejaron gestores ambientales.
Lea también: Empresas ecuatorianas se involucran en la reducción de emisiones de CO2
Estas cifras reflejan el avance en la gestión de residuos por parte de instituciones públicas y privadas. Sin embargo, persiste un desafío significativo en cuanto al adecuado desecho de medicinas por parte de la población, principalmente por la falta de conocimiento al respecto.
“Generar una cultura de correcto desecho de medicinas caducadas se vuelve cada vez más importante para la sociedad, pues permite mitigar el impacto ambiental, consumo accidental de pastillas y/o la venta ilícita de medicinas”, manifiesta Alonso Arias, subgerente de Seguridad, Salud Ocupacional y Ambiente de FEMSA Salud Ecuador.
En nuestro país existen instituciones encargadas de la supervisión, recolección y eliminación de desechos hospitalarios y medicinas caducadas. No obstante, la ciudadanía opta por eliminarlos en la basura local o el desagüe, al no contar con una alternativa de devolución segura y de fácil acceso para el usuario.
Es por ello que, Fybeca invita a la comunidad a desechar de manera segura sus medicinas en los contenedores de Punto Azul en 18 farmacias de la marca a nivel nacional, ubicados en: Quito, Guayaquil, Cuenca e Ibarra.
Lea también: Las bebidas vegetales ganan espacio entre las preferencias del consumidor
Desde su implementación en 2022, Fybeca ha recolectado más de 65 kilogramos de medicamentos caducados o en desuso. Esta iniciativa no solo contribuye a la preservación del medio ambiente, sino que también evita posibles riesgos derivados del incorrecto manejo de medicamentos fuera de fecha.
En un esfuerzo continuo por fomentar prácticas ambientales responsables, Arias resalta que, con todas las medicinas recolectadas a través del programa Punto Azul, se lleva a cabo un proceso integral de eliminación de la mano de un gestor ambiental calificado, garantizando así la seguridad ambiental y la prevención de riesgos para la salud.
En estos puntos se pueden disponer medicamentos vencidos o deteriorados, no necesarios, envases vacíos, blíster, plegadizas y empaques, así como medicamentos parcialmente consumidos.