Telefónica Movistar anunció el incremento de la red de telecomunicaciones de Guayaquil. En los últimos meses la compañía instaló y potenció varias soluciones (antenas) con el fin de dotar de más señal y permitir una mejor experiencia de comunicación a la ciudad.
Estos trabajos también llegaron a los cantones de influencia como Daule, Durán y Samborondón donde se prevé alcanzar un mayor despliegue. “Tenemos un gran compromiso con Guayaquil y su gente. Estamos complacidos de poder decir que los guayaquileños cuentan con más señal. Este es uno de los objetivos más importantes que tenemos como compañía”, señaló el CEO de Telefónica Movistar en Ecuador, Luis Benatuil.
Los trabajos en la Perla del Pacífico son parte de las varias acciones que Telefónica Movistar ha realizado por el país. Hace pocas semanas, sumó a su red de telecomunicaciones a más de 60.000 ecuatorianos de poblaciones rurales, en 14 nuevas parroquias de 10 provincias.
Además, cuenta con tres de los cuatro cables submarinos que arriban al Ecuador. Dos que van a Punta Carnero (Salinas), el SAM1 y el Mistral; y el PCCS (Pacific Caribbean Cable System) que ve tierra en Manta. El SAM1 es cien por ciento propiedad del Grupo Telefónica, operativo desde 2001. El PCCS fue inaugurado en 2015 y el Mistral, en 2021; estos dos últimos en consorcio con otras empresas de telecomunicaciones, en partes iguales.
También realizó un importante despliegue en carreteras y en los últimos meses la empresa sumó más de 200 kilómetros de cobertura en las arterias viales de 14 provincias.
Asimismo, a través de Fundación Telefónica Movistar se brinda capacitación, educación e inclusión social en la era digital. Esto a través de programas como Conecta Empleo, que ofrece aprendizaje digital gratuito para el emprendimiento y la empleabilidad; o ProFuturo, educación digital para niñas, niños, adolescentes de 184 escuelas en las 24 provincias
Telefónica Movistar ha invertido más de 2.600 millones de dólares desde su llegada al país.
Lea también: En el 2022 mejoró la conectividad a internet, pero aún la brecha digital continúa